Esta receta se sirve fría y es muy fresquita, algo que agradeceremos de cara al verano. Puedes modificar su 'dressing' tanto como quieras, cambiando las hierbas aromáticas que utilizas (nosotros hemos elegido eneldo) por perejil, por ejemplo.
- 1 unidad de Pepino
- 0.5 unidad de Cebolla dulce
- 0.5 unidad de Zumo de limón
- Eneldo fresco
- 2 cs de Aceite de oliva virgen extra
- 1 pizca de Sal
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1.
Lavamos muy bien nuestro pepino y lo pelamos, cortándolo en finas rodajas después. Hacemos lo mismo con nuestra cebolla, cortándola en tiras finas.
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2.
Lo ponemos todo en un bol con un papel en el fondo para que suelte un poco el agua.
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3.
Mientras, en un bol pequeño hacemos nuestra vinagreta mezclando bien con una cuchara el aceite de oliva, la sal, el zumo del limón y el eneldo fresco picado.
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4.
Bañamos los pepinos con nuestra vinagreta y servimos siempre fría.
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