¿Con calabaza? ¡Sí! Os aseguramos que encantará a toda la familia, incluso a los más pequeños. Es perfecto para acompañar nuestros desayunos o meriendas gracias al sabor suave y aromático que tiene. También puedes hacerla como regalo pues es una receta sorprendente y deliciosa.
- 450 g de Harina de trigo
- 3 ud de Huevos grandes
- 200 g de Azúcar blanca
- 500 g de Calabaza cruda y limpia
- 200 g de Aceite de oliva suave
- 80 g de Nueces peladas
- 1 cucharadita de Extracto de vainilla
- 1 cucharadita de Canela molida
- 0.5 cucharadita de Nuez moscada
- 1 sobre de Levadura en polvo
- 1 pizca de Sal
- Azúcar glas para espolvorear por encima
- Mantequilla para engrasar el molde
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1.
Precalentamos el horno a 180º.
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2.
Rallamos la calabaza o trituramos con la ayuda de un robot. Reservamos.
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3.
Batimos los huevos con el azúcar en un bol hasta que cambien de color a amarillo pálido y espumen.
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4.
En otro bol, tamizamos los ingredientes secos, es decir, harina, levadura, sal y especias.
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5.
En el bol de los líquidos añadimos el extracto de vainilla y aceite.
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6.
Incorporamos la calabaza que habíamos reservado.
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7.
Removemos hasta que se haya integrado la calabaza.
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8.
Añadimos los ingredientes secos poco a poco y removemos con movimientos envolventes con la ayuda de una lengua de silicona.
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9.
Cuando esté todo integrado, añadimos las nueces, reservando unas pocas para la decoración final.
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10.
Engrasamos un molde rectangular con mantequilla y enharinamos toda la superficie para que no se pegue durante el horneado.
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11.
Vertemos el batido en el molde y decoramos con las nueces que habíamos reservado.
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12.
Metemos en el horno durante 50 minutos o hasta que pinchemos con una brocheta y esta salga limpia.
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13.
Dejamos que repose 10 minutos en el molde.
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14.
Sacamos y dejamos enfriar sobre unas rejillas.
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15.
Espolvoreamos azúcar glas por encima del bizcocho con la ayuda de un colador.
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