Las obleas para empanadillas que ya podemos comprar hechas nos pueden servir como base para infinidad de rellenos. Fritas, al horno, al vapor o a la plancha, podemos cocinarlas con verduras, carnes, pescados, mariscos, queso... pero también hacerlas en versión dulce con frutas o cremas. La mezcla de salmón, queso, nueces y eneldo es un clásico que siempre funciona.
- 12 ud de Obleas de empanadilla
- 200 g de Salmón ahumado
- 1 cs de Eneldo fresco picado
- 100 g de Queso mascarpone
- 100 g de Nueces picadas
- 50 g de Aceite de oliva para freír
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1.
En un bol, mezcla el salmón ahumado picado, el eneldo, el mascarpone y las nueces.
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2.
Si te gusta, incorpora también un poquito de pimienta.
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3.
Reserva unos 30 minutos en la nevera para que coja cuerpo.
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4.
Deja que las obleas se atemperen fuera de su paquete y saca de la nevera la mezcla de salmón.
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5.
Una por una, rellena las obleas y ciérralas haciendo un “repulgue”.
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6.
Para pegar la masa entre sí, puedes usar un poquito de agua mojando la mitad de la oblea, como las empanadas argentinas.
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7.
Una vez rellenas todas las empanadillas, deja enfriar en la nevera durante al menos una hora.
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8.
Calienta el aceite para freír y dorar las empanadillas, pocas a la vez, para que no baje la temperatura del aceite.
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9.
Deben quedar doradas y crujientes por fuera y con el relleno cremoso por dentro.
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10.
Sirve inmediatamente.
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1.
Puedes cocinarlas al horno para hacerlas más ligeras. Tan sólo tendrás que pintarlas con huevo batido y hornéalas 200ºC durante 12-15 minutos.
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