¿Y si la piel estuviera conectada a nuestras emociones?

Felicidad, estrés... gracias a la ciencia podemos asegurar que el rostro sí es el reflejo de lo que sentimos

Por ¡HOLA! + Shiseido

Seguro que te ha pasado. En época de vacaciones o cuando el trabajo se desarrolla con normalidad, tu piel es más luminosa y su tono más saludable que cuando atraviesas un periodo de estrés. No es casualidad, tu piel reacciona ante las emociones. Durante los últimos años se han publicado numerosos estudios que relacionan su aspecto con el estado de nuestra mente o sistema nervioso. La evidencia es tal que se habla incluso de Psicodermatología, una ciencia que tiene en cuenta los factores psicológicos para tratar enfermedades cutáneas. Por eso, Shiseido lleva tiempo colaborando con el Cutaneous Biology Research Center (CBRC) del Massachussetts General Hospital, que forma parte de la escuela de Medicina de Harvard, para tratar de comprender las interacciones entre cerebro y piel.

VER GALERÍA

Investigaciones recientes han demostrado que para comprender el verdadero funcionamiento de la piel hay que relacionarla con el sistema nervioso, el sistema inmunológico y el sistema endocrino. "Es la interacción y el equilibrio entre estos elementos lo que mantiene la homeostasis de la piel, conservándola sana y más bella", explica Nathalie Broussard, Scientific Communication Director de Shiseido, en Ensayo sobre la neurociencia aplicada a la piel.

Gracias a este descubrimiento se puede asegurar que el órgano más grande del cuerpo humano actúa como una especie de detector de información, capaz de dar una respuesta a un estímulo externo y transmitirlo a otras zonas del cuerpo. Y es que está conectado por una compleja red de receptores sensoriales y células. Pensemos en el estrés. "En esos momentos el ritmo cardiaco aumenta y el cuerpo se tensa. El flujo sanguíneo es redirigido por el cerebro hacia los órganos principales. Cuando disminuye el flujo sanguíneo a la piel, su temperatura desciende y pierde su color, dejando de ser rosada y volviéndose más amarillenta, apagada y sin brillo", señala Broussard. Pero esa comunicación disminuye de forma considerable a partir de los 30 años, edad a la que se reducen el número y la sensibilidad de los receptores.  

Loading the player...

 

Neurociencia aplicada a la cosmética

El estudio ha demostrado que los cerca de 800.000 receptores sensoriales de la piel se reducen con el paso del tiempo y con las situaciones de estrés. Esto provoca que las señales no lleguen al cerebro con la misma rapidez y, por tanto, se vuelva más vulnerable a las agresiones internas y externas. Como consecuencia, su capacidad para absorber los ingredientes activos de los cosméticos que aplicamos disminuye. Para evitarlo Shiseido ha desarrollado Benefiance, que aumenta la capacidad de regeneración de la piel. Se trata de una línea antienvejecimiento diseñada con ingredientes activos de vanguardia cuya eficacia se basa en la tecnología de segunda generación ReNeura Technology. Esta tecnología ayuda a mejorar la forma en que la piel capta las señales y logra una mejor conexión, acelerando el proceso de autoregeneración. Así, los resultados son aún más rápidos, ya que corrige visiblemente las arrugas en solo dos semanas.

VER GALERÍA

Gracias a que su fórmula actúa en diferentes niveles, logra una mayor juventud, suavidad y firmeza. Y es que la línea, inspirada en la cosmética japonesa, ofrece una fusión única: la naturaleza prodigiosa y el poder de la ciencia aplicada a la belleza. Tres excepcionales algas japonesas crean el inigualable complejo anti-arrugas Kombu-Bounce Complex, para bloquear y prevenir el envejecimiento. Además, incorpora ashitaba α, una planta medicinal japonesa que protege las células; y los ingredientes activos makurossi, chiorella y cúrcuma, que combaten el fotoenvejecimiento y ayudan a prevenir la formación de arrugas futuras. Lo mejor es que Benefiance Wrinkle Smoothing Cream (100 euros) es adecuada para todo tipo de pieles y se puede utilizar tanto por el día como por la noche. Además, este cuidado se presenta en una formulación más cremosa para las pieles más secas, Benefiance Enriched Wrinkle Smoothing Cream (100 euros)

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Una publicación compartida de SHISEIDO (@shiseido) el

Feliz a cualquier edad

Un estudio llevado a cabo en el año 2000 por los investigadores de Shiseido concluyó que las emociones positivas, como las que experimenta una persona al aplicar un cosmético con textura y aroma agradables, tienen un impacto positivo en la piel. "El uso de un producto cosmético atractivo activa el sistema de recompensa del cerebro, así como las zonas conectadas al sistema endocrino, desencadenando la liberación de neurotransmisores como la serotonina, lo que mejora la estabilidad psicológica. Este descubrimiento indica que los cosméticos nos producen una sensación de satisfacción y calma", explica Broussard. Sobre todo si los efectos se notan con cierta rapidez y los signos de la edad se minimizan e incluso desaparecen.