Después de su conmovedor testimonio sobre el distanciamiento con sus hijos y su batalla judicial con Antonio David Flores en los tribunales, Rocío Carrasco anunció que regresaría en otoño con la segunda parte de la docuserie En el nombre de Rocío. En ella hablaría de la existencia de un diario de La más grande con anotaciones y detalles hasta ahora inéditos, que su hija Rocío Carrasco habría guardado con recelo durante 15 años, y en el que desvelaría intimidades sobre la relación con su marido Ortega Cano y la familia Mohedano. Esos documentos privados de Rocío Jurado causaron un gran revuelo en la familia y aunque en un principio se dijo que sería el torero el que diera comienzo a una batalla legal, finalmente ha sido su hija Gloria Camila quien ha emprendido una guerra en los tribunales para evitar que esos documentos vean la luz. En la demanda presentada por la hija de Ortega Cano, la revelación de estos documentos supondría una intromisión ilegítima en los derechos fundamentales de Rocío Jurado. Y es por ello que hoy Rocío Carrasco ha tenido que presentarse en los juzgados de Alcobendas.
El fucsia, su color fetiche
Vestida con una cazadora tipo biker fucsia, un color con gran significado para ella y que eligió para emitir su desgarrador testimonio en el docureality sobre su vida, unos pantalones y un jersey negro, la hija de Rocío Jurado ha llegado a los juzgados de Alcobendas a primera hora de la mañana con semblante serio y en compañía de su abogado, Javier Vasallo. A las puertas del juzgado le esperaba la prensa, pero ella ha optado por no responder a las preguntas antes del juicio. Rocío Carrasco portaba una mochila y el letrado, una cartera, donde previsiblemente llevaría los documentos que tendría que presentar su cliente ante el juez tras la demanda interpuesta por su hermana, con la que lleva años sin hablarse y con la que a medida que pasa el tiempo el distanciamiento es cada vez mayor.
En la vista oral no ha estado presente Gloria Camila, que no estaba obligada a comparecer, tal y como ha señalado su abogado, Enrique Trebolle, a su llegada a los juzgados. A la salida, el letrado no ha tenido inconveniente en exponer su visión de los hechos. "Ha sido una vista donde tenían que entregar la documentación privada de Rocío Jurado que se hubiera entregado o bien a La Fabrica de la Tele o a Mediaset para realizar una docuserie. Y ellos dicen que no se ha entregado ninguna documentación ni a La Fábrica de la Tele ni a Mediaset, con lo cual es que o bien se ha engañado a la audiencia con el cebo de que había documentos comprometedores o se ha engañado al juzgado. Desde el punto de vista jurídico es preferible engañar a la audiencia que engañar al juzgado, si se engaña al juzgado es cárcel, es querella criminal por estafa procesal", ha puntualizado de un modo contundente. Por último, como abogado de Gloria Camila y Ortega, ha querido exponer que Rocío Carrasco "puede tener un documento, o los que quiera, pero no lo puede hacer público. Ahí vamos a ser muy contundentes y desde luego no vamos a dejar pasar ni una".
'Me ha sorprendido no ver a Ortega Cano'
A continuación Rocío Carrasco también emitía sus primeras declaraciones acerca de la comparecencia: "Bien, ha ido muy bien. Al final me he visto obligada a tener que aportar un documento, el único que no me hubiese gustado aportar nunca en la vida", aseguraba con cierto pesar y misterio sobre los supuestos papeles presentados ante el juez. "Me ha sorprendido no encontrarme aquí a Ortega Cano", era su apreciación pese a que se dijo que había sido su hermana la que había interpuesto la demanda. Antes de partir rumbo a su hogar, la esposa de Fidel Albiac ha querido hacer hincapie en un tema que le ha parecido sorprendente. "Tengo que deciros que había mucha insistencia porque se aportaran documentos, pero ahora resulta que en la vista hay mucha insistencia en que los documentos que se han aportado se quitaran del procedimiento, lo que pasa es que no se han quitado", ha señalado antes de despedirse de los periodistas.
La hija de Ortega Cano comenzó este verano una batalla judicial para evitar que los escritos privados de su madre, Rocío Jurado, vieran la luz en la nueva docuserie de Rocío Carrasco. Después de mucho pelear, logró que su hermana tuviera que presentar los manuscritos que se habrían empleado para la grabación de En el nombre de Rocío. La hermana de José Fernando presentó una demanda de diligencias preliminares por la exhibición de los documentos privados y personales de Rocío Jurado y solicitó que su hermana Rocío entregara en el juzgado todos los papeles. En un primer momento la juez les citó el pasado 15 de octubre para que la esposa de Fidel Albiac presentase los manuscritos, sin embargo esa vista oral quedó suspendida. Pero, tal y como adelantó Beatriz Cortázar en Es la mañana de Federico en Es Radio, hoy es el día en el que la defensora de la audiencia en Sálvame se ha presentado en los juzgados para hacer entrega de los documentos.
Gloria Camila considera que esos escritos de su madre deben seguir siendo privados porque la propia Rocío Jurado así lo dejó dicho en vida en múltiples ocasiones. Del mismo modo, señaló que su hermana Rocío no estaba respetando la última voluntad de su madre y que tenía en su poder esos documentos porque los encontró y no porque se los diera la cantante. La entrega de dichos papeles suponía que había sido admitida la demanda presentada por Gloria Camila, pero el hecho de que Rocío Carrasco haya negado que se hubieran aportado esos documentos privados para el documental supone un giro de tuerca en el proceso. ¿Se eliminará el contenido que afecte a Ortega Cano y su familia? ¿O es que Rocío Carrasco nunca llegó a presentar esos escritos privados en la productora?
Desde la cadena aseguran que la emisión de En el nombre de Rocío avanza según los planes previstos y según ha podido saber ¡HOLA!, la hija de La más grande pasó dos días en Chipiona, el pueblo natal de su madre en Cádiz, a mediados del mes de octubre para grabar las primeras escenas de uno de los programas de televisión más esperados de esta temporada. El Santuario de la Virgen de la Regla, de la que su madre era muy devota, fue el punto de partida de su rodaje.
