Kiko Rivera ha celebrado su cumpleaños en familia, junto a su mujer, Irene Rosales, y sus dos niñas, Ana, de dos años, y la pequeña Carlota. A ellos se unieron unos amigos, que quisieron brindar con el hijo de Isabel Pantoja en este día tan especial. Bastante más delgado, tras haber perdido más de 20 kilos, el DJ ha reconocido que se encuentra en uno de los mejores momentos de su vida, a pesar del distanciamiento con su hermana Isabel y el hecho de que su madre no haya podido ofrecer su concierto en Miami por problemas burocráticos. "Hoy justo hace 34 años estaba así con mis padres. Hoy tengo la suerte de serlo yo", publicaba en sus redes sociales el pasado 9 de febrero. "Probablemente uno de los mejores momentos de mi vida. Gracias a todos por La felicitaciones", añadía. Irene, por su parte, felicitaba públicamente a su marido con el siguiente mensaje: "Un viernes especial, feliz cumpleaños mi vida. Te quiero con locura".
Kiko sopló las velas en un restaurante cercano a su residencia sevillana de Castilleja de la Cuesta. El DJ estaba pletórico y no es para menos. El pasado 30 de enero venía al mundo su hija Carlota, una niña muy deseada a la que Irene colmó de atenciones durante el cumpleaños. Aquí vemos a la sevillana con la recién nacida en brazos, a quien conoceremos este miércoles en las páginas de la revista ¡HOLA!.
Quien no ha felicitado a Kiko es su hermana Isa. La relación entre ellos no pasa por su mejor momento y la joven no conoce todavía a su nueva sobrina. "Lo importantes es llevarse bien con todo el mundo, se viven situaciones a veces que no son bonitas, pero el tiempo lo cura todo. Aprovecho para decir que quiero muchísimo a mi hermana y seguro que el tiempo hace que todo vuelva a su cauce", declaraba el DJ a la salida del centro donde dio a luz Irene. "No ha venido y yo no quise hacer un circo de todo esto... Cando la niña esté en casa vendrá su tía. Hay que tener capacidad de perdonar y en eso yo soy un fenómeno", añadía.
Isa, por su parte, explicaba en Sábado Deluxe la razón por la que su hermano estaría enfadado con ella. "Creo que está dolido por el daño que he podido hacer a mi madre", declaró. “La imagen que está dando mi familia de mi ya cansa”, confesó. "No pienso quedar como la niñata que no ha ido a ver a su sobrina teniendo el hospital al lado, no lo voy a permitir", añadió. Sea como sea, lo cierto es que los hijos de Isabel Pantoja están cada vez más distanciados, y el último capítulo en su relación es que han dejado de seguirse en las redes sociales.
Dejando a un lado los problemas entre Kiko e Isa, nos centramos en Irene, quien mostró su imagen más maternal con la pequeña Ana durante el cumpleaños. Ella también fue la que se encargó la mayor parte del tiempo de la benjamina, a la que llevó en brazos de regreso a casa. La sevillana se ha recuperado en tiempo récord del nacimiento de la pequeña Carlota, y permanece al margen de los conflictos familiares de los Pantoja.
