Y la realidad es que Málaga funciona perfectamente en pantalla, tanto a nivel narrativo, como reconocen sus productores, como por la belleza de sus escenarios. Una historia que podría ser universal y que se asienta en una ciudad que ofrece modernidad y tradiciones culturales y de la que veremos muchas caras diferentes. «La ciudad se va a lucir mucho en la serie», decía Milena Smit, y vaya si lo hace.
Cualquiera que la vea quedará enamorado de muchas de las 25 localizaciones en las que finalmente se rodaron escenas y que la ha convertido en una más de sus protagonistas. La Málaga de siempre, perfectamente reconocible, pero también la otra cara, la que nos ofrecen sus barrios más desconocidos, como El Palo, o la Málaga del interior, donde se imponen los paisajes rurales a sus playas. Una ciudad en la que llueve a menudo en la ficción –aunque en la realidad apenas lo haga una media de 50 días al año–.
Estos son algunos de los lugares que reconocerás y puedes recorrer: