A solo 18 kilómetros de Badajoz y nada más cruzar el Guadiana está la pequeña Elvas, una de las ciudades fortificadas más espectaculares de nuestro vecino portugués. Una joya en forma de estrella con algunos de sus brillantes tesoros en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.Por ¡HOLA!
Cualquier fan del mago más famoso puede montarse un viaje de película sin salir de la península, porque hay un montón de lugares inspirados en la famosa saga de J. K. Rowling: escuelas de magia, casas rurales que recuerdan a Hogwarts, escape rooms, tiendas oficiales… Incluso un bar donde sirven cerveza de mantequilla.Por Andrés Campos
Hay quien viene buscando el Cascais de toda la vida, esa Riviera portuguesa saturada de recuerdos de espías y aristócratas. Pero el que ahora lo peta es el Cascais más moderno, el de los ciclistas y los surfers, donde los visitantes toman clases de cocina portuguesa y alucinan con arquitecturas como la del museo Casa das Histórias, obra de todo un premio Pritzker.Por Andrés Campos
Esta región portuguesa es una tierra llena de sabores auténticos para disfrutar de mil maneras: sentados a la mesa, en sus bodegas, viñedos, lagares... El fruto es una rica gastronomía en la que tradición y modernidad se dan la mano. Los que tienen el privilegio de degustarla o vivir alguna de sus experiencias enoturísticas guardan ese recuerdo para siempre en la memoria.
Los World Travel Awards acaban de publicar su lista de ganadores y nuestro país vecino ha acaparado los premios más importantes a nivel europeo en esta 27º edición.Por ¡HOLA!
A pesar de la gran apertura al turismo que ha experimentado en los últimos años, este pueblecito de la costa portuguesa ha sabido conservar su encanto marinero, con sus interminables playas y sus casitas encaladas que otean impasibles la desembocadura del río Mira.
Desde las vistas de algunos de sus «miradouros» más emblemáticos a hacer un paseo en velero por el Tajo, recorrer sus comercios tradicionales o visitar sus joyas Patrimonio de la Humanidad.Por ¡HOLA!
Ponemos rumbo a la vecina Portugal para disfrutar de la escapada perfecta en pareja. Recorremos las calles de su casco histórico, nos recreamos en las vistas desde sus miradores y nos alojamos en hoteles repletos de encanto.Por CRISTINA FERNÁNDEZ
Andando por los caminos de la sierra portuguesa de São Mamede se descubren todas estas sorpresas y más. La primera, la preciosa villa fortificada de Marvão, sobre la cresta más afilada de este parque natural, ideal para una escapada al otro lado de Extremadura.Por Andrés Campos
Los amantes del ferrocarril lo tienen claro: el tren más espectacular del país vecino es el que recorre los paisajes de viñedos del Duero, entre la estación de São Bento, en Oporto, y el pueblo de Pinhão. Aunque lo cierto es que el trazado continúa hasta Pocinho, muy próximo a la frontera española. Una excursión ferroviaria deliciosa para un día diferente.Por ALFREDO GARCÍA REYES
Habrá que mantener la distancia, estar atento a los corredores de circulación cuando se pasee por la orilla o a otras limitaciones, pero desde principios del próximo mes, Portugal va a dar un paso más hacia la nueva normalidad. En el Algarve, sus kilométricas playas favorecen, aún más, la distancia social.Por ¡HOLA!
Como cada año, entre enero y marzo, esta región portuguesa cambia de color. Es el momento en que florecen los almendros y sus campos se transforman en un cuadro impresionista de tonos rosas y blancos. El espectáculo invita a hacer rutas por la naturaleza, a disfrutar de la gastronomía y, este año como novedad, a participar, el 1 y 2 de febrero, en el primer Festival de los Almendros en Flor.Por ¡HOLA!
Coimbra, Tavira, Funchal, Angra do Heroismo… Por su historia, su ubicación, sus joyas monumentales o su ambiente universitario, todas pueden ser un grato descubrimiento.Por ¡HOLA!
Ahorrar, ahorrar, pero no dejar de viajar. El fin de año se puede hacer cuesta arriba por los excesos navideños, así que si te apuntas a una escapada express a la ciudad portuguesa, te vendrán bien estas ideas para que te salga algo más barata.Por ESPERANZA MORENO
En Ourense está Verín. Y río Támega abajo, ya en Portugal, Chaves. Ambas poblaciones forman una eurociudad (visitchavesverin.com) con servicios y recursos comunes, y con una cantidad exagerada de aguas termales, que ya hacían las delicias de los romanos. En los tiempos que corren, es un placer descubrir dos lugares que se quieren y quieren ser uno, sin importarles las fronteras.Por Andrés Campos
Jardines, tradiciones, monumentos, historia y un muy buen ambiente estudiantil se dan cita en esta ciudad portugesa, aquella que fuera su capital durante varios siglos.
Es uno de los emblemas del país y acaba de ser declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, junto al santuario del Buen Jesús de Braga. Este icono barroco que desató la locura de un rey y que hoy se disfruta con calma, solo está a 40 kilómetros desde Lisboa, ideal para una excursión.Por ¡HOLA!
En este espacio natural costero encontramos un oasis de piscinas y palmeras donde disfrutar de los más de trescientos días de sol que brillan en el sur de Portugal.Por Eva de la Parra
En dos días vamos a descubrir y vivir la capital de Madeira, con tiempo para pasear por su casco antiguo, descubrir sus fortalezas, ascender en funicular a sus exuberantes jardines en la montaña o hacer un tour gastronómico por sus locales más auténticos.Por ESPERANZA MORENO
Dos famosos enclaves surfistas, Peniche y Nazaré, una villa medieval amurallada, Óbidos, y dos monasterios Patrimonio de la Humanidad (Batalha y Alcobaça). Todo en una ruta por la Región Centro.Por Andrés Campos
La Estrada da Escarpa es una carretera que discurre a 300 metros de altura junto al mar y enlaza un montón de lugares sorprendentes. Las playas de Setúbal, el castillo medieval de Palmela, el cabo Espichel y las bodegas de Azeitão forman una ruta deliciosa. Todo, a media hora de Lisboa.Por Andrés Campos
El mar, la naturaleza, las dunas, los animales en libertad, las excursiones… En esta ciudad a solo 20 minutos de Lisboa y de Sintra hay numerosos planes para hacer en familia y todos ellos divertidos.Por ¡HOLA!
Las bodegas de Vila Nova de Gaia, un crucero por la región vinícola del Duero, Aveiro, la Reserva Natural de las Dunas de São Jacinto, el bosque de Buçaco… Otros lugares más allá de la ciudad portuguesa para si se alarga la estancia.Por ¡HOLA!
Los barcos de proa curva que surcan los canales de Aveiro son la imagen más conocida de esta ciudad de la costa central portuguesa. Pero a su alrededor se ven campos de dunas, salinas tradicionales, un acuario de bacalaos y la cuna de la famosa porcelana Vista Alegre. Todo perfecto para ir enlazando en una ruta.Por Andrés Campos
En el centro de Lisboa, con vistas a los acantilados del Algarve, en la espectacular naturaleza de las Azores o rodeados de extensos campos de viñedos. Alojamientos muy especiales desde los que descubrir todos los rincones del país vecino.Por ¡HOLA!
No cuesta nada coger el coche y plantarse en Valença do Miño, Viana do Castelo, Bragança, Marvão, Elvas, Évora o Monsaraz. Siete localidades que quedan a mano de lo más apetecibles para escaparte unos días al país vecino.Por ¡HOLA!
Dueña de un glamour algo retro, cimentado en historias de reyes, casinos a lo James Bond y leyendas de espías de la Segunda Guerra Mundial, lo cierto es que la Costa de Estoril fue durante muchos años conocida como la Costa Azul atlántica, tanto era el lujo que se vivía en ella. Sin embargo, desde hace unos años, tanto Estoril como Cascais, las dos villas unidas por un paseo marítimo que se puede recorrer a pie o en bicicleta, han decidido reinventarse para competir en modernidad con la cercana Lisboa.Por ¡HOLA!
Viana do Castelo, en la costa norte, es unas de las ciudades más bonitas de Portugal. Desde la colina de Santa Luzia se admira en toda su dimensión: el estuario del río Lima, el puerto pesquero, el puente metálico de Eiffel, las inmensas playas de arena fina que la abren al mar, las verdes colinas pobladas de aldeas blancas, la ciudad vieja, la ciudad nueva... Desde luego, merece una escapada. Pero si se busca que esta sea más deliciosa aún, nada como alojarse en ¡una fábrica de chocolate!Por ¡HOLA!