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El rey Felipe ha vuelto a embarcarse hoy a bordo del Aifos para su segunda jornada de entrenamientos de cara a la 41 Copa del Rey MAPFRE. Es la regata más importante del Mediterráneo, la más deseada por todos. También por el Monarca. Nunca antes había preparado la competición mallorquina con tanta premura y dedicación: ya son dos días intensos de entrenamientos, y aún tiene por delante la jornada de mañana, la última antes de escuchar el primer bocinazo de salida, previsto para este lunes en aguas de la famosa bahía de Palma.
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El Aifos de la Armada española que patronea don Felipe también ha sido preparado con mucho mimo para esta gran cita que organiza el Real Club Náutico de Palma. La clase ORC en la que compite ha introducido nuevas reglas, con lo que la Comisión Naval de Regatas ha aplicado modificaciones en el barco para adaptarse a estas variaciones, con el objetivo de que sea lo más
competitivo posible. Estos trabajos han incluido la reducción de 300 kilos en el peso del casco, y a bordo también navegan tres tripulantes menos respecto al año pasado. El proceso de “adelgazamiento” ha dejado el equipo en 12 personas, entre las que sólo hay una mujer, la suboficial de la Armada Natalia Díaz. Todos de nacionalidad española y la mayoría con carrera militar, a las órdenes del almirante Jaime Rodríguez-Toubes y, por supuesto, del rey Felipe.
A todas luces la tripulación real se ha marcado objetivos altos este año. La puesta a punto del barco, los entrenamientos previos, todo parece indicar que van a por todas en la 41 Copa del Rey MAPFRE. El Aifos es un TP52, una unidad de regatas del año 2005, ya muy antigua respecto a las modernas embarcaciones en liza en esta competición, pero hay mucha experiencia y muchas ganas de victoria a bordo. La unidad de la Armada española ya conoció el triunfo en el año 2008, tras una actuación impresionante, pero el entonces príncipe Felipe capitaneaba otra embarcación, el CAM del oro olímpico Fernando León, con el que se quedó a las puertas del podio, en la cuarta plaza. Así que Don Felipe luchará a partir del lunes por su primera Copa del Rey MAPFRE.
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Y este año a la rueda del Aifos podría navegar cada día el Rey, ya que su agenda está libre de compromisos oficiales. El jueves pasado ya conoció a las nuevas autoridades locales, como único acto institucional -de momento- de sus vacaciones de verano en Marivent. Pedro Sánchez, al ser presidente en funciones, no vendrá este año a su habitual audiencia con el jefe del Estado. Eso supone un día más para disfrutar de una de sus grandes pasiones.
Felipe VI ha vuelto a embarcar hoy en el Aifos desde la base naval militar de Porto Pi, adonde ha regresado al finalizar la actividad en el agua. En la bahía se ha cruzado con más de una veintena de equipos que también estaban entrenando, algunos rivales directos en la clase Majorica ORC1, pero ha optado por una sesión de entrenamiento en solitario, lejos de otras unidades. Se ha centrado en probar la velocidad del barco, en todos los rumbos, para identificar el mejor trimado de las velas, y previsiblemente ha dejado la sesión de maniobras para mañana.
La 41 Copa del Rey MAPFRE está organizada por el Real Club Náutico de Palma y la Real Federación Española de Vela, con el patrocinio de MAPFRE y la colaboración institucional del Govern de les Illes Balears, el Ayuntamiento de Palma, la Autoritat Portuaria de Balears y la Federación Balear de Vela.
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