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Los perros de orejas largas necesitan unos cuidados especiales para evitar que sufran infecciones. Como nos cuenta la veterinaria alcalaína Mónica Ramírez, "no es tan importante lo largas que sean, sino que estas sean caídas o no". Cuando las orejas cuelgan, nos detalla la especialista, "el oído no respira bien".
Nos explica que el conducto auditivo de los perros tiene una forma de L, y que la parte vertical está hacia abajo. "El interior del oído es más profundo, oscuro, un medio cálido y, además, húmedo, el hábitat perfecto para la proliferación de microorganismos causantes de una infección, como las bacterias o los hongos".
¿Qué razas de perros tienen este tipo de orejas?
Hay muchas razas que tienen estas características y que, por tanto, necesitan unos cuidados especiales. Entran dentro de esta categoría el beagle, el cocker, el basset hound, el labrador, el golden retriever u otros como el schnauzer o el San Bernardo. "En cualquier perro con orejas caídas el pabellón auditivo no tienen la suficiente ventilación", indica la veterinaria. Esto es algo que se complica si, además, tienen pelo en el interior de las orejas que impida también el paso del aire.
Estos animales son más propensos a acumular cera y suciedad. Si sus orejas no se limpian con productos especiales, nos exponemos a que nuestro peludo sufra un problema de salud que, a la larga, podría ser grave.
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¿Cómo debemos limpiar sus orejas?
Si tienes un perro con las orejas largas, debes intentar mantener una correcta higiene varias veces por semana. Estos son los pasos que debes seguir:
Recorta el pelo de las orejas. Muchos perros tienen una gran cantidad de pelo en sus orejas que penetra hasta el canal auditivo. Lo más apropiado es que desde cachorros se les acostumbre a quitárselo. En algunos casos, se arranca. Pero si tu mascota lo pasa mal, consulta con el veterinario. Hay productos a base de polvos que secan los pelitos para poder arrancarlos sin dolor con unas pinzas especiales.
Limpieza. Con un algodón o una gasa humedecida, limpia con cuidado la parte del oído que puedas ver. Hazlo con cuidado, puesto que esta parte de su cuerpo es muy sensible. No utilices bastoncillos si observas que tiene mucha suciedad. Como nos indica la experta, para limpiarla se utilizan productos especiales para animales denominados ceruminolíticos que la licuan y la expulsan hacia fuera. Consulta antes con el veterinario.
Observación. Otro punto fundamental para evitar que tu perro de orejas caídas sufra infecciones en los oídos es observar su aspecto y su olor. Cuando detectes cera de un color parduzco, como de color chocolate, es posible que sea debido a la proliferación de bacterias u hongos. Si, además, notas un olor desagradable, o tu perro se rasca, es recomendable que hables con el especialista en veterinaria por si es necesario aplicar un tratamiento ótico para eliminar los patógenos.
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¿Qué complicaciones tienen las infecciones de oídos?
Uno de los problemas que pueden aparecer cuando tu perro tiene una infección de oídos no tratada, es que se produzca una rotura de tímpano. Esta puede afectar al equilibrio, que empeorará la calidad de vida de nuestra mascota.
Otras complicaciones son el otohematoma, en el que se rompe una vena de la oreja y se forma una bola de sangre. Aunque en ocasiones requiere cirugía, también puede resolverse solo tras haberlo vaciado, señala Mónica Ramírez.
Como vemos, merece la pena dedicarle un tiempo al cuidado de los oídos de nuestro peludo. De esta manera evitaremos que el animal pase un mal rato y reduciremos el riesgo de que tenga problemas en el futuro.
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