Adornos para decorar las paredes
Es uno de los usos más habituales del macramé: el de hacer tapices y adornos para la pared, ya sea para usar a modo de cabecero o para colocar en la pared principal del salón. Suelen tener una barra de madera como soporte de la que cuelgan las cuerdas que se van anudando de distinta manera, creando patrones diversos.
Este tipo de elementos es perfecto en ambientes de estilo rústico, de inspiración nórdica o en casas de aire nórdico. Si te gustan, encontrarás una amplia variedad de modelos, tamaños y formas. Elige tus favoritos y decora las paredes de tu casa.
Un consejo: puedes utilizar uno de estos adornos de macramé para ocultar ciertos elementos de las paredes que no quieres que se vean como un cuadro de luces o una tapa de un contador.
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