Estos cactus Cereus te van a conquistar con su particular belleza

Los cactus del género Cereus son de forma columnar (es decir, altos y esbeltos) y presentan costillas bien definidas, así como espinas. De distintos tamaños y características, aunque por lo general muy desarrollados en altura, queremos mostraros las variedades que destacan por su singular estética. Pero antes, os explicaremos cómo cuidarlos porque se puede generalizar bastante en toda esta familia de plantas.

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Destacan por su talle esbelto

Cereus es un término latino que significa cirio o vela, pues alude a su forma alargada de gran porte. Los colores más habituales de los cactus Cereus son el verde azulado o bien claro y se trata de suculentas originarias de América, especialmente de estos tres países: Brasil, Uruguay y Argentina. En su entorno natural llegan a alcanzar más de 10 metros de alto, plantados en tierra, y menos cultivados en maceta. En ocasiones (como en el ejemplo de la imagen, un Cereus hexagonus) este tipo de cactus presenta más de un tallo ramificado y sobre todo si los tenemos directamente en el jardín pueden producir flores y frutos.

Tanto si los tienes en interior como en exterior, van a adorar recibir los rayos solares durante buena parte del día. En realidad, da muestra de que les gusta estar en pleno sol el hecho de que presentan espinas muy fuertes o densas.

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El frío y el exceso de riego no va con ellos

Los cactus Cereus son de esas plantas que a menudo tildamos de frioleras, dado que le agradan los inviernos suaves (como los que se disfrutan en las Islas Canarias), con temperaturas mínimas de 10º C, aunque puntualmente soportará encontrarse a 5º C. Es por este motivo que a pesar de que quedan preciosos formando un jardín de rocallas o de cactus, si por las latitudes por las que vives el invierno no es tan apacible, lo mejor es plantarlos en maceta.

Se trata de plantas resistentes, prácticamente solo deberás procurar no excederte con el riego y que cuente con una tierra con buen drenaje, tipo arenosa, para que no retenga la humedad. La época en la que van a necesitar más agua es en la de su crecimiento activo, es decir, en la primavera y el verano.

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'Cereus forbesii spiralis'

Existen varias decenas de especies de cactus Cereus, vamos a descubrir los que más conquistan. Comenzamos con esta variedad hipnótica con esta original forma de bucle, se trata del Cereus forbesii spiralis. Realmente que crezca en espiral es fascinante, ¿verdad?

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'Cereus peruvianus'

Si quieres decorar la casa con un cactus ramificado, el Cereus peruvianus es una opción muy vistosa que destaca porque el tallo presenta de cinco a nueve costillas bien marcadas. Una curiosidad es que, a pesar de su nombre, no procede del Perú sino de Argentina, Brasil y Urugay. En la imagen, un ejemplar de la empresa Fronda.

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'Cereus spegazzinii'

Lo puedes encontrar de porte erecto (como en la imagen) o bien semipostrado y el Cereus spegazzinii se caracteriza por su peculiar aspecto en un verde azulado y, en especial, sus areolas que tienen pequeñas espinas radiales regras con lana blanca. Al igual que las espinas fuertes, a los cactus con pelo les conviene una exposición de pleno sol.

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'Cereus albicaulis'

Esta variedad se denomina albina porque su tallo es de un verde muy claro. El Cereus albicaulis es un cactus poco ramificado que al inicio de su vida es de porte erguido para terminar siendo rastrero. En la imagen vemos el fruto, que es comestible y cuyo sabor recuerda al de la sandía. Las flores que le nacen son de color blanco.

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'Cereus Hildmannianus Monstrose'

Cuando las bellezas son muy singulares suele decirse aquello de ‘gustará o no, pero no deja indiferente’. Exactamente así es este cactus, el Cereus Hildmannianus Monstrose, que se caracteriza por su apretado conjunto de tallos retorcidos con costillas irregulares. Cada ejemplar forma un enorme montón apiñado y de diversas formas de tallos, ofreciendo la sensación de irrepetible. ¡Una obra de la naturaleza sumamente escultural!

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¿Absorben las radiaciones?

A pesar de que a estos cactus se les atribuye la capacidad de mitigar las radiaciones electromagnéticas del ordenador, hasta el punto de bautizarlos como ‘Cactus del ordenador’, en realidad la ciencia concluye que se trata más bien de un mito. La razón es que las ondas viajan en línea recta, por lo que poner un catus Cereus al lado del monitor no ayudaría en nada. Aparte no te preocupes porque este aparato no desprende emisiones ionizantes, las más dañinas para nuestra salud.  Si bien es cierto que las plantas de interior de cualquier variedad siempre son una buena opción no solo para decorar, sino porque ayudan a prevenir los tóxicos en el hogar. En la propuesta, una mezcla de cactus variados, Cereus y de otras familias, todos sumamente ornamentales.

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Cactus en el interior del hogar, una cuestión espinosa

Por último, según el Feng Shui los cactus son plantas suculentas y, por lo tanto, activan la energía de la abundancia. No obstante, el hecho de que presenten espinas los hace más recomendables para espacios exteriores, apuntan los expertos.

En la imagen, la vista cenital de un Cereus fricii, cuya floración es nocturna.

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