Barbacoa de carbón, leña o gas
Unas y otras aportan diferencias en, por ejemplo, el control de temperatura, el proceso de encendido o su limpieza. Valora qué es importante para ti o qué te da más pereza.
Barbacoa de carbón
Quizá las de uso más extendido para los que quieren una barbacoa. Lo más tedioso es el proceso de encendido aunque existen accesorios específicos para este cometido, que facilitan mucho la labor. Son imbatibles en el sabor y olor a brasa que aportan al cocinado. No necesitan estar conectadas a ninguna fuente de electricidad así que puedes ubicarlas donde quieras. Las hay de suelo o portátiles de sobremesa.
Barbacoas de gas
Son muy fáciles de usar, Su encendido es inmediato pero siempre necesitan una bombona de gas para funcionar. Lo ideal es que tengas donde guardar esa bombona o elijas un modelo de barbacoa con un compartimento específico para ello. Tiene mandos con los que se regula la llama y temperatura, controlando perfectamente la cocción. Para un uso regular, es una buena opción. No aportan sabor a brasa, pero es posible ahumar la comida con ahumadores específicos en los que se colocan virutas de madera para lograr ese sabor ahumado.
Barbacoa de leña
Aportan un sabor especial a los alimentos. Hay algunas barbacoas que se pueden usar con leña o con carbón. Son similares en funcionamiento a las de carbón en cuanto a que el encendido es lento y cuesta encontrar el punto de la llama respecto a las barbacoas de gas.
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