Esta crema dulce está entre las natillas, la crema catalana -pero sin el clásico azúcar quemada por encima- y el flan. La peculiaridad que tiene es que la vamos a aromatizar y saborizar con cardamomo, tanto en polvo como usándolo en forma de semillas.
- 1 litro de Nata
- 2 cc de Extracto de vainilla
- 0.5 taza de Azúcar blanca
- 8 ud de Yemas de huevo
- 0.5 cucharadita de Ralladura de limón
- 0.5 cucharadita de Ralladura de naranja
- 0.5 cucharadita de Cardamomo molido en polvo
- 1 cucharadita de Semillas de cardamomo
- 1 unidad de Canela en rama
-
1.
Echa la nata en un cazo y añade la vainilla, la canela, las ralladuras y las semillas y el polvo de cardamomo y deja que hierva a fuego bajo 2-3 minutos. Retira del fuego, tapa y espera 30 minutos para que infusione.
-
2.
Precalienta el horno a 160ºC.
-
3.
En un cuenco grande mezcla las yemas de huevo con el azúcar y ve añadiendo, sin dejar de remover, la mezcla de nata con especias.
-
4.
Cuela y echa el resultado en unos moldes llamados ramequines -de cerámica, resistentes al horno-.
-
5.
Coloca los moldes en una bandeja y añade agua de forma que queden cubiertos 2-3 dedos por abajo.
-
6.
Introduce en el horno y espera entre 30 y 45 minutos.
-
7.
Saca con cuidado del horno, deja enfriar y decora con semillas de cardamomo.
Más recetas de
DULCES:
Últimas recetas: