Típica de los meses más fríos del año, la calabaza es uno de los productos de la huerta que más nos gustan. Y es que su sabor es ideal para recetas tanto dulces como saladas. Aquí vamos a utilizarla como ingrediente protagonista de unos flanes muy golosos. Vistosos y riquísimos.
- 500 g de Calabaza
- 100 ml de Leche
- 50 ml de Leche evaporada
- 2 Huevos y 2 yemas
- 100 g de Azúcar
- 0.5 cucharadita de Nuez moscada rallada
- 2 cs de Aceite de girasol
- Sal
- Canónigos
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1.
Retirar la piel y las semillas a la calabaza, trocearla y cocerla 40 min en agua con una pizca de sal.
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2.
Pasar por el pasapurés con la mínima cantidad de agua posible y dejar enfriar del todo sobre un colador.
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3.
Engrasar con el aceite el interior de 6 moldes individuales de flan.
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4.
Precalentar el horno a 180º.
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5.
Mezclar en una ensaladera la leche con la leche evaporada.
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6.
Batir en un cuenco los huevos las yemas, el azúcar y la nuez moscada.
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7.
Incorporar el puré de calabaza y añadir después a la ensaladera de las dos leches.
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8.
Mezclar y repartir en los 6 moldes engrasados.
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9.
Colocarlos en una fuente refractaria con agua hasta la mitad de la altura de los moldes y hornear al baño maría entre 25 y 30 min a 180º.
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10.
Lavar y secar los canónigos.
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1.
Desmoldar los flanes en los platos una vez que se hayan enfriado del todo y acompañarlos con los canónigos.
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