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Fácil
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¡HOLA! COCINA
El término pastel nos lleva irremediablemente al mundo dulce. Sin embargo, el recetario de pasteles salados es muy amplio y variado. Estos de pescado y calabacín son un buen ejemplo. Primero los freiremos y después los terminaremos en el horno.
- 400 g de Pescadilla sin piel ni espinas
- 2 Calabacines
- 1 Cebolla
- 2 Huevos
- 1 cucharada de Albahaca picada
- 8 cs de Harina
- 6 cs de Pan rallado
- 150 ml de Aceite de oliva para freír
- Sal
- Pimienta
- Confitura de cerezas para acompañar
-
1.
Precalentar el horno a 180º.
-
2.
Retirar las puntas a los calabacines, lavarlos y rallarlos.
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3.
Pelar y picar la cebolla.
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4.
Desmenuzar el pescado con las manos y echarlo en una ensaladera con la cebolla y la albahaca picadas, el calabacín rallado, 2 c.s. de harina, 1 huevo y una pizca de sal y de pimienta recién molida.
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5.
Mezclar y dividir en 6 porciones.
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6.
Echar en un plato hondo el resto de la harina y en otro el pan rallado.
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7.
Batir el huevo restante en otro plato hondo. Formar porciones grandes y pasarlas por harina, huevo batido y pan rallado, presionando ligeramente con las palmas de las manos.
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8.
Calentar el aceite en una sartén y freír las porciones por las dos caras durante 4 min por cada lado.
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9.
Colocar las porciones fritas en una fuente refractaria y meterlas al horno a 180º entre 4 y 7 minutos para que se cocinen por el interior.
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1.
Disponer los pasteles de pescado y poner la confitura en un tarrito aparte.
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