Un plato tradicional y contundente de nuestra gastronomía que, cocinado con 'slow cooker', nos sorprenderá con un sabor muy potente y unas fabes enteras y mantecosas, gracias a su lento cocinado que se prolongará durante 7 horas.
- 500 g de Fabes asturianas
- 2 ud de Chorizo asturianos
- 2 ud de Morcilla tipo asturiano
- 150 g de Lacón
- 150 g de Panceta ahumada
- 1 ud de Hueso de jamón
- Azafrán
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
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1.
Pon las fabes en remojo durante 10 horas y el lacón en otro recipiente para quitarle gran parte de la sal. Pasado ese tiempo, escurre el agua y coloca las fabes en el 'slow cooker'. Añade las carnes y embutidos e incorpora agua hasta que cubra las legumbres, aproximadamente un dedo. Es conveniente controlar la cantidad de agua para que la fabada no quede aguada.
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2.
Añade dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra y unas hebras de azafrán. Programa tu 'slow cooker' durante 7 horas en temperatura baja.
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3.
Transcurrido ese tiempo, prueba el punto de la legumbre: debe estar suave, tierna y entera. Si aún no lo está, cocina durante unos cuantos minutos más, comprobando en tramos de media hora si está ya lista.
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4.
Prueba de nuevo y rectifica de sal si fuese necesario. Deja que repose durante 3 horas para que tome cuerpo.
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5.
Para que el caldo ligue bien, mueve la olla en círculos; pero no la remuevas con la cuchara, pues romperás las fabes.
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6.
Sirve muy caliente con los embutidos y las carnes troceadas.
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