El Papa Francisco habla de la gravedad de su último ingreso: 'Unas horas más y no habría podido contarlo'

El Sumo Pontífice, de 86 años, ha hablado con un amigo al que conoció por un trágico suceso hace una década

Por Belén Nava M.

El pasado domingo reapareció el Papa Francisco para presidir la tradicional Misa de Pascua en la basílica de San Pedro. Retomaba de este modo sus compromisos un día después de ser dado de alta tras estar ingresado tres días en el Hospital Agostino Gemelli de Roma por una infección respiratoria que ahora se ha conocido que era más grave de lo que se pensaba. Así lo ha confirmado Michele Ferri, un amigo del Sumo Pontífice que ha explicado que el sábado hablaron por teléfono y le dijo que llegó al centro sanitario inconsciente.

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En conversación con el diario local Il Resto del Carlino, Ferri ha dicho que en la llamada el Papa Francisco le comentó: "Unas horas más y no habría podido contarlo". Ya con el susto atrás, sostiene que el jefe de la Iglesia católica, de 86 años, estaba animado y con sentido del humor comentó que todavía está vivo. A través del teléfono encontró su voz "en forma, sonora y serena". Además, comparándolo con la última vez que habían hablado en enero, dice que "le escuché mejor que cuando y me pareció que estaba más cansado".

Al recibir el alta y ser preguntado por su dolencia exacta, el Papa Francisco animó a los periodistas a preguntar a los médicos porque "yo no entiendo nada". Al llegar a su hogar, la residencia Santa Marta, tenía buen aspecto y estaba animado. Además, durante el ingreso se interesó por la labor que se lleva a cabo en la planta oncológica infantil del hospital. El Pontífice habló con los sanitarios, escuchó los testimonios de los familiares y entregó algunos regalos a los pequeños pacientes. Nada hacía pensar, por tanto, que su situación había sido delicada horas antes.

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El origen de su amistad

La amistad del Papa Francisco con Michele Ferri, de 52 años e informático de profesión, comenzó hace una década a raíz de una tragedia. Andrea, hermano de Michele fue asesinado durante un atraco en una gasolinera y este escribió una carta al pontífice en la que se preguntaba el por qué de ese suceso. Aquella misiva le impresionó y desde entonces le ha llamado un total de 90 veces para interesarse por toda la familia. El último contacto fue el sábado 8 de abril a las a las 11:20 y cree que el 4 de junio, coincidiendo con el aniversario de la muerte de su hermano, volverán a hablar.