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Lola comenzaba la semana pasada a tontear con Simone, uno de los solteros de la tercera edición de La isla de las tentaciones que ha acudido a República Dominicana para intentar encontrar el amor. Ambos han tenido química y parece que pueden llegar a algo más. Durante los primeros días, la exconcursante de Mujeres, Hombres y Viceversa y el exparticipante de First Dates se miraban profundamente, se acariciaban, abrazaban y expresaban lo que estaban empezando a sentir el uno por el otro. Así, Diego ha tenido que enfrentarse a la primera hoguera en la que ha visto el comportamiento de su novia con el italiano. "No me hace nada de gracia que diga que le gusta y que le parece mono que la llame 'Bimba'. Creo que ese feeling puede ir a más perfectamente", comenzaba tras ver las imágenes. Pero lo peor de todo estaba por llegar al ver los siguientes vídeos. Ha sido entonces cuando el extronista decidía lo que iba a pasar con su mascota en el caso de ver a su novia sobrepasar el límite. "Si hay un beso que se olvide del perro", relataba.
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Hace unos días, Lola confesaba a sus compañeras que lo que más le dolería de romper su relación es la idea de perder a Horus, el perro que ambos tienen en común: "Yo a Diego le quiero mucho, pero si lo dejo con él por equis razones no me voy a morir porque sé tirar para adelante sin un hombre pero el perro tía... si él ve algo que no le gusta va a quitármelo de golpe para hacerme daño porque es rencoroso y vengativo... Se rompe una familia. Que hombres hay muchos, pero el perro... solo es el. Nunca voy a tener un perro igual, es casi humano", relataba entre lágrimas la novia de Diego.
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"Obviamente el perro está a mi nombre y si ahora se lía con este chaval... el perro se queda conmigo porque es mío", sentenciaba el participante de La isla de las tentaciones a Sandra Barneda. Además, Diego tachaba a su chica de mentirosa al escucharla decir que nunca quiere salir o que cuando tiene vacaciones no quiere irse de viaje y solo va a ver a su familia en Santander. "Lo que ha dicho es mentira. Yo viajo mucho por trabajo, pero sí que quiero hacer cosas, aunque obviamente en verano quiero ir a ver a mis padres porque no les veo durante el resto del año. Además, yo a ella le propongo otros planes que no quiere porque es una vaga y está todo el día tirada en el sofá". "Lo que más me choca de todo esto es que antes de entrar aquí quisiera formar una familia conmigo y ahora en dos días se le haya olvidado tan fácilmente", añadía decepcionado.
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