Tenían previsto darse el 'sí, quiero' el próximo mes de junio, sin embargo, como muchas otras parejas, se han visto obligados a cancelar sus planes debido a la crisis del coronavirus. José Bono Rodríguez y Aitor Gomez tendrán que esperar hasta el 3 de julio del 2021 para poder celebrar la boda que ellos querían. La situación de emergencia sanitaria que estamos viviendo ha condicionado los preparativos del enlace y, según ha podido saber HOLA.com, no solo han visto modificada la fecha sino también el lugar en el que brindarán por su amor con sus familiares y amigos más cercanos.
Los novios habían organizado primero una ceremonia civil en el Ayuntamiento de Toledo, donde les iba a casar la alcaldesa Milagros Tolón, y, después, con un mayor número de invitados y un ambiente más festivo, la celebración iba a tener lugar en el Palacio de Galiana, situado a orillas del Tajo y con unas vistas privilegiadas de la ciudad. Sin embargo, han cambiado de idea y lo harán en el Castillo de Batres, una espectacular fortaleza situada en el municipio de Batres, al sur de Madrid y en el límite con Toledo.
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Se trata de un castillo renacentista, declarado en 1970 Conjunto Histórico-Artístico, que está situado en un paraje natural de ensueño. 80 hectáreas de campo rodean la fortaleza que cuenta en su interior con un patio de armas y dos imponentes salones con galerías columnadas, con una capacidad para 350 invitados. En el exterior, los novios y sus invitados podrán disfrutar de un bosque de árboles centenarios y jardines al más puro estilo italiano. "El Castillo de Batres es un espacio único para celebrar eventos, donde la Historia y la Alta Cocina de cuatro empresas gastronómicas se funden para crear experiencias con una inigualable puesta en escena", dicen en su página oficial haciendo referencia a los grandes nombres de la cocina española más internacional: Paco Roncero, Ramón Freixa, Dani García y Medems Catering.
Esperarán hasta que todo haya pasado
Tal y como explicó el propio jinete hace unos días en un vídeo en directo que hizo con sus fans, en un primer momento su plan era retrasar la boda hasta septiembre, pero no les hacía mucha ilusión casarse con mascarillas y que quizá no pudieran asistir algunos de sus seres queridos, que son mayores o están en situación de riesgo. Además, contó que, por suerte, el viaje que tenían planeado por África estaba solo reservado pero no pagado, por lo que no han perdido nada y podrán disfrutarlo una vez se hayan dicho el 'sí, quiero' el próximo año.
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