A corazón abierto. Así se mostró Eugenia Martínez de Irujo durante su participación en Planeta Calleja, programa conducido por el recién galardonado con un Premio Ondas, Jesús Calleja. Coincidiendo con la víspera de su cumpleaños, la duquesa de Montoro se atrevía con la propuesta del aventurero y se desplazaba hasta las Islas Feroe donde, como le aseguró a Calleja, llegó a pasar miedo. Alejada de su realidad en Madrid y en un escenario de ensueño, la aristócrata desnudaba su alma llegando a hacer sorprendente revelación sobre su vida personal. A pesar de que fue una niña muy feliz, según Eugenia Martínez de Irujo existió una persona muy importante en el pasado de su madre que marcó profundamente su preadolescencia. Se trata ni más ni menos que de Jesús Aguirre, segundo marido de la duquesa de Alba.
Una sincera Eugenia se animaba a relatar al presentador los duros momentos que vivió junto a este hombre, al que describió como "mala persona": "Para mí Jesús Aguirre fue muy malo". El que fuera esposo de la Duquesa de Alba durante 25 años tras la muerte de su padre, Luis Martínez de Irujo, se convirtió en el gran trauma de su infancia. Tanto es así que incluso se animó a contar un impactante episodio vivido con su padrastro: "Con once años me llamó a su despacho y me dijo que si seguíamos viviendo en la casa de mi madre era gracias a él". Las vivencias de Eugenia chocaban de lleno con la imagen pública que Aguirre proyectaba frente a la sociedad española de la época: "Todo el mundo lo tiene en los altares y para mí fue una pesadilla, pero mi madre siempre le defendió". No obstante, la duquesa quiso dejar muy claro que, a pesar de todo lo vivido con Aguirre, recuerda con mucho cariño su infancia. Una época en la que no siempre obedeció a su madre: "Fui una niña rebelde la verdad. Cada vez que podía iba en contra de las normas".
La duquesa repasó los momentos más significativos de su presente a nivel profesional y personal. Además de confesar que su colaboración con TOUS (con quienes lleva trabajando dos décadas) le proporciona la estabilidad económica que necesita. La exmujer de Francisco Rivera aseguró que se encuentra disfrutando de una etapa de felicidad plena también a nivel personal. Casada con el productor musical Narcis Rebollo, la hija pequeña de la duquesa de Alba no tuvo inconveniente en relatar lo sorprendente que fue, también para ella, la irrupción de su actual marido en su vida: "Lo cierto es que no estaba en mis planes volverme a enamorar". Una unión marcada por el sentido del humor: "Lo que más me gusta de él es que es muy divertido. La boda en Las Vegas surgió charlando tras acudir a la gala de los Grammy. Los dos teníamos claro que teníamos que ir disfrazados, yo de Marilyn y él de Elvis".
Como no podía ser de otro modo, en su sincera confesión también hubo lugar para la figura de su madre. Su vida junto a ella y el gran vacío que ha dejado tras su pérdida han marcado su vida, según Eugenia, de una manera muy profunda: "Tras su muerte lo pase muy mal. Echo mucho de menos su gran personalidad y su sentido del humor". Del mismo modo, Eugenia recordó a su nanny Margarita, fallecida un año después que la duquesa de Alba: "Ella me crió en parte y su hija (que tiene Síndrome de Down) es como una hermana para mí. Ahora ella vive con Cayetano que es su tutor legal".
