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Desde que hace dos días Harry de Inglaterra conociera a Rihanna en Barbados con ocasión del 50º aniversario de la independencia de la isla, antigua colonia británica, y se presentara con un “hola, encantado de conocerte”, el tono entre el Príncipe y la estrella se ha vuelto mucho más distendido y hemos asistido al nacimiento de una bonita amistad y a un derroche de muestras de complicidad. Han compartido en este tiempo bromas, abrazos y hasta una prueba de VIH en vivo y en directo como parte de una campaña de sensibilización.
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Aprovechando que ayer era 1 de diciembre, fecha que se dedica a la lucha contra el sida desde 1998, el príncipe Harry y Rihanna se unieron para dar ejemplo y se sometieron juntos a un análisis de sangre ante las cámaras. Gesto con el que la pareja pretendía demostrar a la población que la prueba es rápida, sencilla y nada dolorosa. Harry de Inglaterra, con camisa blanca y mangas remangadas, fue el príncipe valiente y el primero que tendió el brazo al sanitario, ante la mirada de Rihanna, con camisa blanca de pronunciado escote e igualmente remangada, que aguardaba pacientemente su turno.
Le tocó entonces a la estrella, que se mostraba tranquila pese a la cara de miedo que le ponía el príncipe Harry. Tras el pinchazo en el dedo, comentó mientras se quitaba una gota de sangre que no había sido “tan horrible”. Las pruebas del VIH, un virus que ataca el sistema inmunitario y debilita la capacidad defensiva del cuerpo para combatir otras enfermedades, sólo llevaron unos minutos y los resultados fueron negativos para los dos.
Ian Green, director ejecutivo de Terrence Higgins Trust -una organización benéfica de salud sexual del VIH, líder en el Reino Unido-, dijo al respecto: “No podíamos esperar un mensaje más fuerte contra el estigma del VIH”. Luego elogió el “impacto formidable” que el gesto podría tener en millones de jóvenes, para luego añadir: “Gracias al príncipe Harry y al apoyo público de Rihanna en la prueba del VIH, estamos un paso más cerca de un mundo sin el estigma del VIH”.
La llamada de conciencia de la estrella y el Príncipe, que ya se prestó a una prueba de VIH el pasado verano en Londres, discurrió con buen humor, pero el príncipe Harry se toma muy en serio su lucha contra el VIH y el sida, heredada de su madre, la princesa Diana. Durante una visita a un hospital de Barbados, el príncipe Harry se reunió con el experto en VIH pediátrico, el doctor Kumar Amok, y le dijo: “Quiero decir a todos los que no se hayan hecho la prueba: que se la hagan, independientemente de quiénes sean, de sus antecedentes, de su cultura o de su religión”.
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