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La princesa Leonor ha participado este sábado en el que es uno de los actos más importantes y significativos de su carrera militar: su jura de bandera. Con un beso en el estandarte nacional, la heredera al trono, de 17 años, ha escenificado su compromiso con España con una solemne ceremonia castrense cargada de tradición y que ha estado presidida por sus padres los Reyes.
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Desde una hora antes de que comenzara el acto, muchos familiares (hasta cuatro personas) y miembros del público, unos 2.500, han ocupado su sitio en el graderío del patio de La General, como se conoce la Academia del Ejército de Tierra. A diferencia de este viernes, cuando la Princesa de Asturias y el resto de caballeros y damas cadetes participaron en la ofrenda floral a la Virgen del Pilar bajo un sol más propio de verano que de principios de octubre, la capital aragonesa se ha despertado este sábado nublada y con temperaturas agradables, aunque luego ha despejado. Una climatología perfecta para una ceremonia en la que los 411 cadetes, los que quedan en la Academia de los 612 que ingresaron en esta nueva promoción el pasado 17 de agosto, han ido vestidos con el uniforme de gala del siglo XIX que está compuesto chaqueta de manga larga azul marino, pantalón encarnado y sombrero de plumas.
- Los gestos de camaradería entre la princesa Leonor y sus compañeros durante la ofrenda floral
- El emotivo momento en el que la princesa Leonor ha pedido protección a la Virgen del Pilar
A mediodía, ha dado comienzo el acto presidido por don Felipe y doña Letizia, con un vestido azul cielo sin mangas, quienes han estado acompañados por la ministra de Defensa, Margarita Robles y el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón. El himno nacional y 21 salvas de honor han precedido el pase de revista del soberano para que después la bandera se colocara en el centro del patio y fuera venerada.
Los alumnos de primer curso han formado en el patio, en el que es uno de los días más importantes de su carrera militar, antes de pasar a la parte más emocionante del evento cuando el director general ha dicho: "¡Caballeros y damas alféreces cadetes y alumnos! ¿Juráis por Dios o prometéis por vuestra conciencia y honor cumplir fielmente vuestras obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si fuera preciso, entregar vuestra vida en defensa de España?" A lo que la promoción ha dicho al unísono y de forma enérgica: 'Sí, lo juramos'. Acto seguido se les ha recordado que: "Si cumplís vuestro juramento o promesa, España os lo agradecerá y premiará y sino os lo demandará. Caballeros y damas cadetes ¡Viva España! ¡Viva el Rey!".
A pesar de la importancia del juramento de este sábado y de la presencia del monarca y su esposa, se ha querido dar la mayor normalidad posible a la ceremonia y la Princesa no ha homenajeado a la enseña nacional de manera individual como hizo su padre, sino que ha sido la primera de su promoción en besar la histórica bandera que la reina María Cristina de Habsburgo, viuda de Alfonso XII, regaló a la Academia en 1886. Desde entonces, 29.000 oficiales han besado su paño, entre ellos dos jefes de Estado y una futura Reina. Ante la mirada y la sonrisa de sus padres y entre aplausos del público, la cadete Borbón Ortiz ha besado con gran solemnidad el estandarte mientras los Reyes no podían ocultar su orgullo y satisfacción.
Vestida con el uniforme de gala de la primera época de la Academia, que data del siglo XIX cuando la institución se albergaba en Toledo, la heredera se ha quitado el sombrero o ros rematado de plumas rojas y ha besado la bandera rojigualda para después volver a su puesto dentro de la formación.
Después de que todos los cadetes rindiesen tributo a la bandera, se ha producido otro momento de gran emoción. En grupos de tres, con la Princesa de Asturias a la cabeza han desfilado bajo el arco formado por el sable y la bandera simbolizando que la nación acepta su compromiso. Al igual que el resto de cadetes, la heredera ha agachado la cabeza.
Las palabras de un orgulloso padre
Acto seguido ha sido el turno de la intervención del director de la Academia que ha agradecido la presencia del Rey, no solo como monarca, sino como padre de la cadete Bobrón Ortiz y se ha dirigido al resto de los familiares ante los que ha ensalzado el esfuerzo y sacrificio de todos los alumnos. Por último, don Felipe ha tomado la palabra y ha comenzado diciendo: "En un día como hoy es inevitable que recuerde aquel 11 de octubre de 1985, cuando yo presté mi juramento ante la bandera de España en este mismo patio de armas de la Academia General Militar. Han pasado 38 años, y pienso en lo que entonces sentí y en lo que significa para mí presidir -junto a la Reina y con orgullo- la jura de nuestra hija la Princesa de Asturias. Es muy emocionante; y tiene una gran trascendencia ver cómo hoy la Princesa da continuidad a ese juramento junto a una nueva promoción de cadetes".
En la parte final de su intervención, Felipe VI ha manfiestado: "Permitidme que me dirija a la Princesa de Asturias. Leonor, recuerda que el compromiso que has asumido conlleva la mayor responsabilidad con España. Sabes bien, como Princesa Heredera, que la Corona simboliza su unidad y su permanencia. Sé que el juramento solemne ante esta bandera y el cariño por esta tierra zaragoza y aragonesa que te acoge, formarán parte de tus mejores recuerdos. Sé que siempre tendrás presente que tu responsabilidad, en cualquier circunstancia y en todo momento, es servir a España con toda tu energía y determinación, con verdadera pasión".
El homenaje a los caídos ha sido otro de los momentos clave de la jornada donde dos cadetes han hecho una ofrenda floral y todos al unísino, incluidos don Felipe y su primogénita, han cantado La muerte no es el final. En último lugar, los 411 alumnos han entonado el Himno de la Academia General Militar tras lo que han recibido una gran ovación. Cuando los alumnos han abandonado el patio, los Reyes han dejado la tribuna para ver el desfile en el que también ha participado su hija. Don Felipe y doña Letizia han saludado uno a uno a los jefes de las unidades militares de la Academia.
Como ya hicieron don Felipe en 1985 y don Juan Carlos en 1955, la Princesa de Asturias se convierte en la tercera Borbón que hace este juramento en la Academia militar como parte de su formación en el Ejército de Tierra, que continuará en el Ejército del Aire y en la Armada. En un futuro, cuando sea Reina, Leonor ostentará el mando supremo de las Fuerzas Armadas.
Leonor pasa a segundo curso
La jura de bandera supone un antes y un después para la heredera al trono, que ya ha vivido otras ceremonias militares importantes como la obtención de la boina grancé, la entrega de sables, que la acredita como dama cadete, o la ofrenda floral a la Virgen del Pilar para pedir su protección. A partir de ahora, la Princesa de Asturias pasará a segundo curso, ya que se ha creado un itinerario específico para ella.
Un mes que supondrá un antes y un después para la heredera
Tras este acto, que también simboliza su entrada oficial en el Ejército, a la primera en la línea de sucesión dinástica le espera un mes de octubre que marcará un antes y un después en el ámbito institucional. El jueves, 12 de octubre, Día de la Fiesta Nacional, la veremos en la tribuna junto a sus padres por primera vez desde 2020 ya que estos dos últimos años ha estado estudiando en un internado de Gales (Reino Unido) y debutará en la recepción de la Fiesta Nacional.
Una semana más tarde viajará a Oviedo para participar en las actividades con motivo de la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias. El 31 de octubre cumplirá los 18 años y jurará la Constitución en las Cortes Generales. Posteriormente, y en el Palacio Real, recibirá el Collar de la Orden de Carlos III en presencia de los poderes del Estado y a continuación se celebrará un almuerzo con una representación de las más altas autoridades. Con posterioridad a estos actos en el Congreso y en el Palacio Real, habrá en el Palacio de El Pardo una celebración familiar y privada que incluirá a la Familia Real, la familia del Rey y de la Reina.
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