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La Casa Real británica ha organizado este martes un servicio de acción de gracias por la vida de Constantino de Grecia, último rey de los helenos, quien falleció el 10 de enero de 2023 a la edad de 82 años. Y aunque no han podido asistir Carlos III ni el príncipe Guillermo, sí que hemos visto a la reina Camilla y, como era de esperarse, a los representantes de la realeza griega. Pablo de Grecia y su mujer, Marie-Chantal, han viajado a Windsor en compañía de su hija Olympia desde Nueva York, ciudad en la que residen actualmente.
- La reina Letizia, elegante y sobria en Windsor con capa y pendientes de perlas
Marie-Chantal de Grecia, un look burdeos estilo años 50 en la misa homenaje a su suegro
Eludiendo el tradicional negro mortuorio, la mujer de Pablo de Grecia se ha enfundado al completo en un estilismo rojo vino, una de las gamas de tendencia esta temporada. Su elección le permitió resaltar entre los invitados, aunque dado el triste motivo de este encuentro se aferró a la sobriedad que aporta su chal de punto a juego. El vestido, si nos fijamos con atención, presenta un cuello plano que recuerda a los antiguos diseños de los años 50, con su falda acampanada de largo midi, pero se distingue precisamente porque este cuello aparece ladeado ligeramente.
Marie-Chantal ha mantenido esa misma discreción al momento de elegir los complementos, empezando por unos salones en ante burdeos de tacón modesto que se sincronizan con el resto del conjunto. En sus manos, carga un bolsito de mano en piel de efecto cocodrilo color negro que rompe (sin llamar demasiado la atención) con el carácter monocromático del look.
A la vez que ha optado por un maquillaje natural, de pómulos marcados por polvos bronceadores para conseguir un sutil efecto 'lifting' en el rostro, quien sería reina de los griegos solo ha querido incorporar al look unos finos de aros dobles con diamantes.
La sobriedad de su hija Olympia, a juego con la reina Letizia
A diferencia de su madre, quien ha optado por un estilismo burdeos, Olympia de Grecia ha decidido ceñirse al protocolo que también ha marcado los looks de la reina Letizia o Nina Flohr: la combinación de azul marino con negro. Antes prohibido en las enciclopedias de moda, este tándem cromático ahora cobra protagonismo en los posados más elegantes de las mujeres de la realeza.
La modelo e influencer da el ejemplo con este vestido navy de mangas largas, escote barco y falda recta, que lleva debajo de un abrigo negro con solapas a contraste y hombreras, puesto a modo de capa sobre los hombros. Completa el look con medias de cristal, unos salones destalonados de charol negros y un bolso Bamboo negro, de Gucci.
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