Como cada año, el diario ABC ha entregado sus tres Premios Internacionales de Periodismo: Mariano de Cavia, Luca de Tena y Mingote. Sus Majestades los Reyes han presidido este acto celebrado en la Casa de ABC, en Madrid, que reconoce la trayectoria profesional y los mejores trabajos periodísticos de 2017. Para la cita, que, considerando su pasado como periodista, seguro le resulta especial, Doña Letizia no ha seguido su tónica habitual de lucir nuevos y sorprendentes diseños, sino que ha optado por la discreción. Así, mientras en ediciones anteriores impactó con un sofisticado vestido de Nina Ricci o un favorecedor mono burdeos de Ángel Schlesser, esta noche la Reina ha recuperado un vestido midi de Carolina Herrera que estrenó hace más de un año.
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La Reina ha roto esta noche con una tradición de arriesgar que llevaba varios años establecida en estos premios. Esta noche, sin embargo, Doña Letizia optaba por la seguridad del siempre acertado color negro, con un vestido de lentejuelas de Carolina Herrera que incorpora paillettes blancos a modo de falsos lunares. Se trata de un diseño que estrenó en noviembre de 2017, en una recepción del Presidente de Israel y su mujer en El Pardo, de largo midi, corte lady y sin mangas, un estilo que siempre centra la atención en los tonificados brazos de la Reina. Confeccionado en seda, este vestido recrea uno de los acabados favoritos de Carolina Herrera, la mezcla de lentejuelas bicolores. De hecho, la propia diseñadora lució en diciembre de 2016 una versión larga y con escote barco del vestido de Doña Letizia.
Igual que hizo en noviembre de 2017, la Reina ha optado esta noche por dos clásicos compañeros de cualquier vestido negro como complementos: stilettos (de Lodi, con acabado charol) y bolso de mano (de Magrit) en ese mismo tono. También el maquillaje y el peinado, que dejaba a la vista los brillantes pendientes de chatones que llevó entonces, han recordado al look anterior; solo un detalle los diferenciaba. Hoy el recogido de la Reina tenía un acabado ligeramente undone gracias a los mechones sueltos que enmarcaban su rostro. El resultado es más relajado y rejuvenecedor, y continúa con el nuevo estilo que Doña Letizia ha adoptado en los últimos meses, más natural.
