¿Cuándo hay que tomar terapia hormonal en la menopausia y qué riesgos existen?

No está recomendada en todos los casos, sin embargo, hay nuevos medicamentos que pueden ayudar a transitar mejor esta etapa de la vida de la mujer

Por Nuria Safont

Al llegar la menopausia, la mujer deja de producir hormonas femeninas y esta circunstancia provoca la aparición de una serie de síntomas como sofocos, aumento de peso, vaivenes emocionales, sudores nocturnos, dificultad para dormir, sequedad vaginal o incontinencia. El adelgazamiento de la piel, la osteoporosis, una baja libido, fatiga o pérdida de masa muscular son otras señales de esta caída del estrógeno. La THS (terapia hormonal sustitutiva) es la forma de combatir esos síntomas tan desagradables, nos cuenta el Dr. Miguel Ángel Barber, jefe del servicio de obstetricia y ginecología de Hospital Vithas Las Palmas

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Principales hormonas que se utilizan en la THS

Tal como nos explica este experto, hay que distinguir en la actualidad entre dos sistemas diferenciados. En primer lugar, se encuentran las tradicionales terapias THS basadas en estrógenos y derivados, tales como la progestina o la progesterona que, aunque cuentan con mayores beneficios que problemas, sí presentan algunos riesgos asociados. Por otro lado, se encuentran las terapias de reemplazo de hormonas bioidénticas (TRHB), cuyo nombre deriva de que se utilizan hormonas sintéticas biológicamente idénticas a las que el cuerpo produce de forma natural, sin riesgo para los pacientes.

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¿Cómo se determina si una mujer es candidata para la THS?

En principio es candidata cualquier mujer que sienta que los síntomas de la menopausia están deteriorando su calidad de vida, así como el aceleramiento que suele provocar en el proceso del envejecimiento. No obstante, "existen algunas excepciones en el caso de la THS con hormonas no bioidénticas, como algunos tipos de cáncer, haber sufrido un accidente cerebrovascular o ataque cardíaco, haber tenido coágulos de sangre o padecer una enfermedad hepática. No ocurre lo mismo con las hormonas bioidénticas, que pueden ser utilizadas en general por cualquier paciente sin riesgo", indica. 

En cuanto a su duración, se estima que la terapia de reemplazo hormonal debe durar el menor tiempo posible, siendo su máximo en torno a cinco años, y conllevar la dosis mínima necesaria siempre bajo la supervisión de un especialista que cada año valorará la conveniencia de su mantenimiento y la cantidad necesaria.

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Impacto en la prevención de enfermedades

Se ha demostrado a partir de diversos estudios que "la terapia hormonal previene la pérdida ósea y, por tanto, protege frente a la osteoporosis y reduce el riesgo de fracturas. También contribuye a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso a mejorar el perfil lipídico en sangre", señala el Dr. Miguel Ángel Barber. 

Asimismo, la THS mejora la salud mental y el estado emocional de las mujeres que atraviesan la menopausia al combatir los vaivenes emocionales que produce la desaparición del estrógeno en el organismo, pero no debe utilizarse como sustituto de un antidepresivo o para mejorar las habilidades cognitivas.

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Tras 20 años de uso, ¿se sabe ya si puede aumentar el riesgo de cáncer de mama?

Algunos tipos de terapia hormonal se han relacionado con un riesgo algo mayor de cáncer de mama. En cualquier caso, aclara el especialista de Vithas Las Palmas, "los peligros asociados con la THS dependen no sólo del tipo de terapia hormonal sino de la dosis, el tiempo que se prolonga el uso del medicamento y los riesgos de salud individuales. Para obtener los mejores resultados, la terapia hormonal debe adaptarse a cada persona y reevaluarse con determinada frecuencia para asegurarse de que los beneficios siguen siendo superiores a los peligros que presenta", sostiene. 

Existen otros riesgos asociados como coágulos, accidentes cerebrovasculares o enfermedad cardiaca que dependen, no obstante, no solo de la administración de estas terapias, sino de cuál de ellas se adopte, la edad en la que se comienza, su duración, la dosis e incluso el propio historial de cada paciente. Por eso recomiendo acudir a consulta para valorar de forma individualizada cada caso y la terapia más adecuada, aunque en general los beneficios superan a los riesgos.

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¿Existen alternativas a la THS para aliviar los síntomas de la menopausia?

"La terapia de reemplazo de hormonas bioidénticas (TRHB) que comentaba es una alternativa me atrevería a considerar superior en la mayoría de los casos, ya que son naturales y permiten que el cuerpo las metabolice correctamente. A diferencia de las hormonas sintéticas, podemos personalizar las hormonas bioidénticas para que se adapten a las necesidades individuales del paciente. De hecho, se elaboran de forma individualizada a partir de una analítica y se aplican por vía transdérmica. Además de no conllevar los riesgos de la THS, ayudan a reducir los signos del envejecimiento y el riesgo de otros problemas de salud como diabetes, pérdida de dientes y cataratas", concluye el Dr. Miguel Ángel Barber. 

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