Una manera diferente de disfrutar de los ricos membrillos de temporada: aquí los preparamos al horno para, posteriormente, envolverlos con masa brisa. Sumaremos un 'corazón' de queso que aportará cremosidad a esta receta tan pintona como sabrosa.
- 4 membrillos
- 1 lámina de Masa quebrada (pasta brisa)
- 4 cs de Azúcar moreno
- 4 tacos de Queso semicurado
- Canela
- Azúcar blanca
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1.
Lavar bien los membrillos, cortarlos por la mitad y sacarles el corazón.
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2.
Ponerlos en una bandeja de cristal apta para horno con dos dedos de agua y el azúcar y hornear a 180º durante 1 horas aproximadamente, pinchando de vez en cuando para ver cuándo están blandos. Sacar y dejar enfriar.
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3.
Pasado este tiempo, escurrir y colocar en el hueco que ha quedado del corazón un trocito de queso.
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4.
Extender la masa brisa, dividir en cuatro partes y envolver las dos mitades de cada membrillo.
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5.
Hornear a 170º durante 20 minutos o hasta que comiencen a dorarse.
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6.
Servir aún templados espolvoreados con una mezcla de canela y azúcar.
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7.
Tip: si se prefiere un sabor más especiado, pueden añadirse unos clavos y una ramita de canela o también unas estrellas de anís en el agua de la bandeja al hornearse.
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