En algunas ocasiones comer en nuestro lugar de trabajo es sinónimo de hacerlo sin tener en cuenta unos hábitos saludables, tomamos cualquier cosa 'y cubrimos el expediente'. Y lo cierto es que no se tarda nada en preparar cosas sencillas el día o unos días antes que, además de nutritivas y ligeras, sean ricas y nos hagan disfrutar de esa comida casi como de cualquier otra. Este plato cumple con todos esos requisitos.
- 2 ud de Pechuga de pollo
- 2 ud de Cebolla morada
- 2 ud de Patata
- 2 ud de Zanahoria
- 1 unidad de Tomate
- 1 unidad de Calabacín
- Albahaca
- Semillas de sésamo blanco
- Salsa de soja
- Pimentón
- Chile en polvo
- Zumo de lima
- Aceite de oliva
- Sal
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1.
Corta la pechuga de pollo en dados y marina con salsa de soja, copos de chile, zumo de lima y pimentón.
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2.
Pela la cebolla morada; una la cortas en juliana y la otra en 'brunoise' -daditos pequeños-.
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3.
Lava, seca y corta en daditos tanto el calabacín como el tomate.
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4.
Pela las zanahorias y las patatas, corta en cuadraditos y ponlas a cocer 15 minutos en una olla al fuego con agua hirviendo y sal.
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5.
Echa aceite en una sartén y rehoga la cebolla cortada en daditos y el calabacín durante unos 4-5 minutos.
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6.
Salpimenta y añade la zanahoria, la patata y el tomate y rehoga unos minutos más.
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7.
Pica la albahaca y añádela a las verduras.
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8.
Ensarta en unos palos de brocheta los dados de pollo escurridos y la cebolla cortada en juliana.
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9.
Cocina el pollo a la plancha o a la brasa por ambos lados y al final añade unas semillas de sésamo.
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10.
Cuando esté todo frío, mete en una tartera o en una 'bento box' las verduras y las brochetas, tapa y conserva en la nevera hasta que lo vayas a comer. Se recomienda darle unos minutos de micro antes.
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