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30min
Fácil
Por
BEATRIZ TORIJA
Esta receta de pasta es perfecta para el verano y las vacaciones. Se elabora con verduras frescas, la salsa de tomate natural la hace muy gustosa, y la albahaca y la mozzarella, que se incorporan al momento de servir, le da mucha frescura y un colorido que hará brillar tu mesa. ¿Quién se puede resistir a unos espaguetis como estos?
- 400 g de Espaguetis
- 1 Calabacín
- 1 Berenjena
- 200 g de Salsa de tomate
- 100 ml de Vino blanco
- 2 bolas de Queso mozzarella
- 2 ramilletes de Albahaca fresca
- Sal
- Pimienta negra
- Aceite de oliva virgen extra
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1.
Lavamos la berenjena y, sin pelar, la partimos en rodajas y éstas, a su vez, en medias lunas. Hacemos lo mismo con el calabacín, lo lavamos, retiramos los extremos y partimos las rodajas en dos.
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2.
Cocinamos en una plancha o al grill bien caliente, por los dos lados, hasta que estén bien hecho. Si no nos caben, los podemos hacer en varias tandas. Una vez hechos, les ponemos una pizca de sal. Reservamos.
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3.
Acercamos una cazuela al fuego con el vino blanco y llevamos a ebullición. Dejamos cocer un par de minutos para que se evapore el alcohol antes de añadir la salsa de tomate. Cocinamos a fuego suave para que vaya reduciendo. Ponemos a punto de sal y pimienta negra recién molida.
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4.
Mientras tanto, calentamos agua abundante. Cuando rompa a hervir ponemos los espaguetis junto a un pellizco de sal y un hilito de aceite de oliva. Cocemos siguiendo las instrucciones del fabricante hasta dejarlo al dente.
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5.
Cuando la pasta esté lista escurrimos y pasamos inmediatamente a la cazuela con la salsa de tomate. Incorporamos también el calabacín y la berenjena. Damos una vuelta para que se integre todo bien y cocinamos un minuto más.
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6.
Servimos inmediatamente, con la mozzarella rota en pedacitos irregulares por encima y unas hojas de albahaca fresca. Terminamos el plato con un hilito de aceite de oliva virgen extra por encima. ¡A disfrutar!
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