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¡HOLA! COCINA
Optamos aquí por unas vistosas cerezas amarillas para coronar un merengue de almendras al ningún goloso podrá decir ‘no’. Existen distintas variedades de cereza que nos ofrecen ese bonito color amarillento (como la llamada 'Cereza blanca de Provenza', por ejemplo). No obstante, si no las encuentras, puedes, por supuesto, sustituirlas por cerezas rojas o picotas.
- 3 Claras de huevo
- 200 g de Azúcar glas
- 50 g de Almendras
- 0.5 cucharadita de Esencia de vainilla
- 200 g de Cerezas amarillas
- Flores comestibles
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1.
En un cazo a fuego suave, poner las claras y la esencia de vainilla junto con el azúcar glas y remover hasta que el azúcar se haya disuelto, pero teniendo cuidado de que no se caliente demasiado. Retirarlo del fuego y dejar que se enfríe.
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2.
Mientras, hacer un polvo grueso de almendras con una picadora eléctrica.
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3.
Cuando las claras estén frías, montarlas a punto de nieve muy firme.
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4.
Añadir las almendras, mezclar con cuidado para que no se bajen, meter la mezcla en una manga pastelera con boquilla redonda y formar un merengue circular de unos 20 cm de diámetro.
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5.
Dibujar con un cuchillo líneas desde abajo hasta arriba alrededor de todo el merengue.
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6.
Meterlo al horno a 90º durante 1 h y 15 min. Apagar el horno y dejar que se enfríe dentro.
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7.
Colocarlo en un plato, decorarlo por arriba con las cerezas y unas flores comestibles y servirlo.
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