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¡HOLA! COCINA
Versionamos aquí el tradicional tiramisú dándole forma de apetecible tarta. Entre sus ingredientes no faltan impresdincibles como el café, el queso mascarpone o los bizcochos de soletilla. Es un postre ideal para preparar con antelación porque necesita su tiempo de frío, y también es perfecto para llevar si vas de invitado.
- 200 g de Galletas de mantequilla
- 100 g de Mantequilla sin sal
- 200 ml de Nata
- 70 g de Azúcar glas
- 500 g de Queso mascarpone
- 170 ml de Café
- 30 ml de Orujo
- 24 Bizcochos de soletilla
- 100 g de Merengues pequeños
- 25 g de Cacao en polvo para decorar
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1.
Triturar las galletas con una picadora eléctrica.
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2.
Derretir la mantequilla, añadirla a las galletas, mezclar bien y poner la mezcla sobre el fondo de un molde desmontable redondo de unos 20 cm de diámetro presionando ligeramente.
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3.
Montar la nata con el azúcar y mezclarla con cuidado con el mascarpone.
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4.
Poner un tercio de esta crema sobre la base.
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5.
Mezclar por otro lado el café y el orujo, bañar ligeramente los bizcochos y colocar una primera capa sobre la crema.
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6.
Añadir otro tercio de la crema encima y otra capa de bizcochos y terminar con la crema restante.
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7.
Meter la tarta al frigorífico toda la noche.
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1.
Desmoldar la tarta, decorar con merengues su parte superior, espolvorearlas con cacao y servirla en porciones individuales.
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2.
Consejo: esta tarta se puede congelar. Pero debe hacerse sin el cacao, que se espolvoreará en el momento de servirla.
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