¿Sabías que puedes preparar unos deliciosos flanes con esta harina gruesa procedente del trigo y sin utilizar el horno o el baño María? Si lo prefieres, puedes utilizar un poco menos cantidad y acompañar este postre con cualquier otra fruta o mermelada.
- 250 ml de Leche
- 2 cs de Azúcar blanca
- 1 pizca de Canela molida
- 30 g de Sémola de trigo
- 1 ud de Huevos
- 250 g de Melocotón
- 3 cs de Granada
- Sal
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1.
En un cazo, ponemos a hervir la leche y disolvemos en ella el azúcar y la canela molida. Removemos bien e incorporamos la sémola, sin dejar de dar vueltas con una cuchara y dejándola cocer a fuego lento hasta que veamos que comienza a espesar. Retiramos y reservamos, para que vaya enfriándose.
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2.
Separamos la yema de la clara del huevo y se la agregamos a la sémola.
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3.
En otro bol, montamos la clara a punto de nieve con un poco de sal. Mezclamos con todo lo anterior, con suaves movimientos envolventes.
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4.
Repartimos la mezcla anterior en un par de moldes para flan e introducimos en el frigorífico un mínimo de seis horas.
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5.
Lavamos los melocotones, los deshuesamos, los troceamos y los ponemos en una cazuela con una cucharada de agua, una pizca de azúcar y cocemos durante dos o tres minutos, triturándolos después con una batidora si queremos, o dejándolos así, con su almíbar.
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6.
Servimos cada uno de los flanes con el melocotón y unas semillas de granada.
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