Las recetas de brownie siempre destacan en la repostería... ¡y no nos extraña! Este dulce tan sencillo de preparar se presta a cualquier ingrediente, así que, esta vez hemos apostado por una elaboración en la que sobresalen el chocolate blanco y los pistachos. Una alternativa innovadora para reinventar este clásico dulce. ¿De verdad te vas a quedar sin probarlo?
- 75 g de Azúcar blanca
- 2 ud de Huevos
- 75 g de Mantequilla
- 150 g de Chocolate blanco
- 80 g de Harina
- 1 cs de Levadura en polvo
- 50 g de Pistachos pelados y troceados
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1.
Precalienta el horno a 180 grados para que esté a la temperatura adecuada cuando haya que introducir el brownie.
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2.
Coloca en un bol el azúcar y los huevos y bátelo bien todo (también se puede utilizar una batidora o unas varillas eléctricas), retirando y reservando.
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3.
Vierte ahora en otro bol la mantequilla y el chocolate troceado y continúa batiendo todo hasta que el chocolate quede emulsionado y fundido con la mantequilla.
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4.
Añade a esta última mezcla los huevos reservados y la harina mezclada con la levadura y vuelve a batir todo bien.
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5.
Agrega los pistachos a la mezcla anterior y mezcla todo a mano con movimientos envolventes.
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6.
Vuelca toda la mezcla en un molde rectangular previamente engrasado.
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7.
Introduce el molde en el horno y hornea durante 20 minutos (durante este tiempo no abras la puerta del horno, si no el brownie bajará).
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8.
Una vez que esté listo, ya se puede sacar del horno dejando que se enfríe y a servir.
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9.
Para que tenga el resultado apetecido, debe estar húmedo por dentro.
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