Listas, tontas, de Santa Clara... endulza este San Isidro con sus típicas rosquillas

Son de lo más típico que tomar en esta fiesta madrileña. Listas, tontas, de Santa Clara... te damos algunas recetas, curiosidades, consejos para hacerlas y lugares dónde comprarlas

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Las rosquillas más famosas son las tontas y las listas, aunque coincidiendo con la festividad de San Isidro, también se consumen en Madrid otras rosquillas como las de Santa Clara y las francesas. ¿Conoces en qué se diferencian? ¿Las has preparado alguna vez en casa? ¿Sabes dónde comprar en Madrid algunas de las mejores? Te respondemos a todas estas preguntas. ¡Lee hasta el final con atención!

Son el dulce más icónico de San Isidro y se elabora en gran parte de las pastelerías madrileñas.

¿Cuáles son las distintas variedades de rosquillas de San Isidro?

«Las tontas» no llevan glaseado, «las listas» van cubiertas con un baño de azúcar y limón, las de «Santa Clara» están bañadas con un jarabe hecho a base de claras de huevo que le da su característico color amarillo y «las francesas» llevan una cobertura hecha con azúcar glas y almendras.

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Hay una costumbre que nos dice que hay que mojarlas en vino blanco para disfrutarlas o acompañarlas de una deliciosa limonada, pero puedes hacerlo con un chocolate, con un café o con cualquier bebida caliente o fría que te apetezca.

Con medio siglo de historia, el Horno San Onofre (con establecimientos en calle Mayor, calle San Onofre, calle Hernani y calle Hortaleza) ofrece estas 4 variedades durante estos días. "Y es que Madrid, mucho antes de que naciera San Isidro, ya era una ciudad de rosquillas", apunta Ana Guerrero, segunda generación de la propiedad de este dulce negocio. "Y cuando se habla de estas rosquillas hay que diferenciar, sobre todo dos tipos: las de los altares y las que se tomaban durante las romerías. La preferida por los madrileños es la lista y después la de Santa Clara, aunque la francesa cada día está más en auge y la tonta también".

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Cómo hacer paso a paso las rosquillas tontas

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Estas son las conocidas como 'rosquillas tontas', que se toman durante todo el mes de mayo y especialmente en la fiesta de San Isidro.

Rosquillas tontas y listas: origen

"El origen de las rosquillas tontas se remonta a la Edad Media y no llevan ningún glaseado aunque con una masa muy rica, que tiene que ver mucho con los churros ya que van fritas", nos cuenta Ana. Añade Moncho López, de Levadura Madre Natural Bakery, con numerosos puntos de venta en Madrid, que "la masa es de las tontas es la base de las otras". En sus establecimientos también elaboran y comercializan por San Isidro las 4 variedades de rosquillas.

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"Las listas están cubiertas de clara o yema y limón y se reconocen por su color amarillo y su receta, que le dio fama a su inventora, la Tía Javiera, a finales del siglo XIX. Este personaje a quien elogiaba el mismísimo Jacinto Benavente, se labró buena fama en la pradera de San Isidro por su buen hacer y dotes para vender", según Ana Guerrero.

Cómo hacer paso a paso las rosquillas listas

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Las rosquillas listas están bañadas con una mezcla de sirope de azúcar, zumo de limón y huevo batido.

Rosquillas de Santa Clara y rosquillas francesas

"Conviven con las tontas y las listas, las rosquillas de Santa Clara, que llevan también la base de las tontas pero están cubiertas de un merengue blanco muy vistoso. Se llaman así porque parece ser que fueron las monjas de Santa Clara del Monasterio de la Visitación, las que las inventaron", apunta Moncho López. 

Añade Ana que "luego están las francesas, que nacieron de los caprichos de Bárbara de Braganza, cuyo paladar afrancesado no se rebajaba a las rosquillas tontas, y para quien el cocinero real ideó una receta con almendra picada y azúcar que ennoblecía a la rosquilla tonta. Se cuenta también que la reina, de origen portugués, pudo inspirar además esos nombres de las listas y las tontas, vinculados al refrán “la suerte de la fea la guapa la desea”, referido a su matrimonio con el guapo Fernando VI. La rosquilla francesa es un homenaje a ella, que vino de Portugal y rescató las costumbres bellas en la Villa y Corte".

Cómo hacer paso a paso las rosquillas de San Isidro sin gluten

Las rosquillas también se pueden hacer sin gluten, aptas para celíacos.

Donde comprar rosquillas de San Isidro

La Mallorquina

Listas, tontas, de Santa Clara… más de 100 años llevan en La Mallorquina preparando este dulce típico madrileño y este no iba a ser menos. Además de poder recogerlas en sus dos locales, el de la Puerta del Sol y el de Velázquez, podrás pedir a domicilio una caja completa para darte un capricho de 330 gramos por 16 €.

Más información:  www.pastelerialamallorquina.es

Horno de San Onofre

Es uno de los obradores con más solera de Madrid, abierto en la calle del mismo nombre en 1972 por Daniel Guerrero. Desde este local, al frente del cual hoy están sus hijas, Ana y Mónica, elaboran rosquillas del Santo como producto de temporada y envían a domicilio previo encargo por teléfono (915 22 73 77 y 915 59 62 14), además de en su página web  y en el resto de sus locales (Horno la Santiaguesa, calle Mayor, 73, Tahona San Onofre, calle Hortaleza, 9 y otro Horno San Onofre, calle Hernani, 7).

Horno de San Onofres es una de las pastelerías míticas de Madrid, donde siguen haciendo las variedades clásicas de rosquillas para San Isidro.

Más información: www.pasteleriasanonofre.com

Levadura Madre Natural Bakery

Moncho López es el creador de la idea Levadura Madre Natural Bakery y su socio, Iñaky de la Cuesta, el cerebro en la sombra de este obrador que tiene repartidas por Madrid numerosas tiendas, donde venden sus famosos panes artesanos pero también una delicada repostería, con piezas de todo tipo elaboradas artesanalmente y con las mejores materias primas. Consulta sus puntos de venta para poder comprar las 4 variedades de rosquillas de San Isidro.

Más información: www.levaduramadre.es

Viena Capellanes

La historia de esta pastelería se remonta a 1873, cuando se comenzó a hacer el mejor pan de Viena. Desde entonces, se han ido reinventando hasta convertirse en todo un referente en la capital. Aquí elaboran sus rosquillas de forma completamente artesanal usando las mismas fórmulas de hace más de un siglo. Para los amantes de este dulce, Viena Capellanes ofrece las versiones clásicas y la la rosquilla del Año Jubilar -creada en 2022-, con el merengue aromatizado con violeta y pequeños trozos de los castizos caramelos de violeta. Sirven a domicilio a través de su web y también tienen algunas tiendas abiertas para ir a comprarlas: C/ Alcalá, 127, C/ Fuencarral, 122 y C/ María de Molina, 1 y las de C/ Génova, 4 y Avenida de Europa.

Rosquillas aromatizas con esencia de violeta y trocitos del popular caramelo madrileño, de Viena Capellanes.

Más información: www.vienacapellanes.com

Pastelería Manacor

Tanto la tienda como el servicio a domicilio de la veterana cadena de pastelerías madrileña Manacor, que lleva abierta desde 1753, sigue funcionando a pleno rendimiento ofreciendo todo tipo de dulces y, por supuesto, las rosquillas de San Isidro en sus variedades más clásicas. Pueden adquirirse estos días a través de su web y también en su local, ubicado en la calle Palos de la frontera, 15. Hay dos tamaños: de 12 unidades (10,50€) y de 24 (21€).

Más información: www.pasteleriamanacor.es