Subestimar el masaje
Que disciplinas como el yoga facial o herramientas como los rodillos de jade o las piedras gua sha viven su momento de gloria se justifica por la efectividad que consiguen en términos de drenaje, reducción en la apariencia de las arrugas o flacidez. Eso sí, la técnica es clave a la hora de notar resultados y en el caso del contorno de ojos no es diferente. Para empezar, el producto se masajea con el dedo anular, nunca con el índice, ya que el primero es el más débil y, por lo tanto, el que ejerce menor presión. En cuanto al movimiento correcto, sería a pequeños toquecitos desde fuera hacia dentro para combatir la aparición de bolsas; y al contrario para tratar las arrugas de expresión. Por último, no hay que olvidarse del párpado superior ni del entrecejo.
Ahora que la teoría está clara y sabemos cómo aprovechar las propiedades del contorno de ojos al máximo, te proponemos algunas fómulas que destacan por su desempeño sobresaliente.