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Cada vez son más los hombres que apuestan por cuidarse y llevar a cabo una rutina de belleza diaria, ejercicio en el que también se incluye la depilación. Bien por comodidad o bien por pura estética, una buena parte del sector masculino ha decidido acabar con el vello de piernas y pecho dando así un paso más hacia lo que se conoce como el hombre metrosexual. Años atrás esta práctica podría resultar algo raro, pero en la actualidad es algo cada vez más común. Así pues, el debate no se establece aquí, sino en lo que respecta al vello facial y más concretamente a las cejas.
Como ya hemos repetido en numerosas ocasiones, este es un rasgo que define por completo la expresión del rostro por lo que hay que tener cierto cuidado a la hora de escoger un diseño o de, simplemente, retirar parte del vello. Un paso en falso podría darte un aspecto nada deseado, punto clave que hace que la mayoría de hombres se lo piensen mucho antes de hacerlo. En cambio existen celebrities que, como Tyler Posey, retocan mínimamente el entrecejo para eliminar el antiestético vello consiguiendo un resultado perfecto, pero ¿qué pasa cuando nos metemos a dar forma y creamos, por ejemplo, unas cejas más finas?
La máxima de aquellos que rechazan esta práctica reside en apostar por la naturalidad y es que las cejas muy perfiladas no solo resultan femeninas sino que, como ya hemos dicho antes, cambia por completo la expresión del rostro y en muchos casos a peor.
La recomendación perfecta para limpiar la mirada sin perder tu personalidad y estilo es, en primer lugar, apostar por la herramienta adecuada: unas pinzas. Sí, duele un poco más que la cera puesto que van tirando pelo a pelo, pero también evitas retirar vello de más. Lo mejor será acudir a un profesional, pero si vas a hacerlo tú mismo en casa hazlo siempre después de la ducha. Es en este momento cuando los poros están abiertos y notarás menos los tirones. Evita crear arcos o darles forma y retira únicamente el entrecejo. ¿Sabes cómo calcular la distancia exacta? Muy sencillo. Coge un lápiz y colócalo en la aleta de la nariz totalmente vertical y paralelo a tu ceja, el vello que quede por dentro será el que debas retirar.
¡Ojo! porque si finalmente decides depilarte las cejas te atarás a una rutina de belleza semanal que, para la mayoría de los hombres, resulta innecesaria. Si tu problema es que el vello es muy largo siempre puedes recurrir a unas tijeras para retocarlas, opción que resultará mucho más sencilla y cuyos resultados siempre serán mejores que la depilación.
Y por si te entra la tentación debes saber que, excepto el caso de Charlie Puth, quien tiene una cicatriz de un accidente que sufrió en la infancia, las cejas partidas ya no se llevan.
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