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Los romances y las series de época siguen de moda y ahora se suma un nuevo título que luchará por robar el corazón de la audiencia. Se trata de la ficción italiana El paraíso de las señoras que, desde este lunes, ocupa la sobremesa de La 1 junto con La Promesa. Esta exitosa producción cuenta una apasionada historia de amor, mentiras y rivalidad que tiene lugar en unos grandes almacenes de la ciudad de Milán en la década de los 50 y que está protagonizada por Giusy Buscemi, Miss Italia 2012, y Giuseppe Zeno.
En El paraíso de las señoras confluyen las múltiples tramas personales de los protagonistas mientras se muestra un completo reflejo social de la Italia de aquella época, con el universo de la moda como escenario principal. Es una serie de largo recorrido que cuenta en su haber con, nada más y nada menos que siete temporadas y ya hay confirmada una octava, con un total de 860 capítulos, sin contar los de esta última entrega, que harán las delicias de los espectadores.
En Italia, esta producción, que encantará a los amantes de Velvet por sus similitudes con ella, comenzó sus dos primeras temporadas con una periodicidad semanal y en la tercera se comenzó a emitir de manera diaria. Dado el alto coste de la producción, la Rai 1 decidió finalizarla pero, era tal el éxito de la ficción y las protestas del público, que quería seguir disfrutando de su serie favorita, que El paraíso de las señoras continuó y siguió triunfando entre los espectadores que no han faltado a la cita diaria desde que esta novela se estrenó en su país de origen en el año 2015.
La Italia de los años 50 como escenario de una bella historia de amor
La ficción está ambientada en Milán en los años 50, concretamente en 1956, y muestra como el país transalpino ha dejado atrás las secuelas provocadas por la Segunda Guerra Mundial: la economía se recupera, hay esperanzas renovadas en el futuro y la nación se abre a la modernidad. Es un momento en el que la ciudadanía comienza a cambiar sus comportamientos y sus hábitos de vida.
Todo se muestra a través del día a día de una gran empresa textil. La protagonista es Teresa Iorio (Giusy Buscemi), una joven que se muda a Milán, capital de la moda italiana, en busca de una oportunidad y una nueva vida, dejando atrás su pueblo natal para trabajar en unos grandes almacenes, epicentro de las historias de rivalidad, amor y celos que se desarrollan a lo largo de la serie.
Pietro Mori (Giuseppe Zeno) es el propietario del negocio, un hombre que ha traido de América la idea de que la belleza en el vestir debe ser asequible para todos y trata de popularizarla en la sociedad de Milán que, en ese momento, se considera moderna y de vanguardia. Una tarea en torno a la que surgen numerosas relaciones profesionales y personales entre las dependientas, responsables, contables, mozos de almacén y compradores de los almacenes y que mostrará una radiografía de la Italia del momento.
Teresa, que destaca por su fuerte personalidad, formará parte de un grupo de vendedoras bautizadas como 'Las Venus', apelativo que reciben por su belleza y elegancia. Por su parte, Pietro es un hombre entregado en cuerpo y alma a su proyecto comercial, pero con un pasado misterioso. En el ámbito personal, el corazón del dueño de los almacenes se dividirá entre su trabajadora, la joven Teresa, y su prometida, Andreina Mandelli (Alice Torriani), hija de un rico banquero.
El universo de El paraíso de las señoras se completa con los componentes del equipo de publicidad, con el carismático y creativo Vittorio Conti (Alessandro Tersigni) a la cabeza; la señorita Clara Mantovani (Christiane Filangieri), encargada de que la atención a los clientes sea perfecta, de aspecto rígido, pero con unos intensos sentimientos; el señor Enzio Galli (Andrea Pennacchi), el contable, una bellísima persona siempre dispuesto a ayudar; y los chicos del almacén, todos con sus peculiaridades.
¿Cómo arranca la serie?
Teresa abandona Sicilia para huir de su anticuado estilo de vida, de las estrecheces ideológicas del sur y, sobre todo, del prometido que le han impuesto y que no les gusta. Su destino la lleva a Milán a casa de sus tíos, quienes tienen una tienda de tejidos. Cuando llega, se encuentra con que llevan a su tío a la cárcel acusado de haber quemado un furgón del almacén de la competencia, de El paraíso de las señoras.
Convencida de la inocencia de su familiar, la chica no lo duda y va a hablar personalmente con Pietro Mori, propietario del negocio. Aunque la relación entre ambos no empezará con buen pie, pronto surgirá entre ellos una fuerte atracción que pondrá en apuros sentimentales al empresario, que también está acuciado por problemas económicos.
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