Ya ha pasado un año desde que la madre de Irene Rosales, Mayte Vázquez, falleciese a los 58 años a causa de una grave enfermedad. Mucho ha llovido desde entonces para su hija y su familia, que no han dejado de tenerla siempre presente. "Un año después sigo sin poder hacerme a la idea de que ya no te volveré a ver mamá y no sabes cuánto me duele... Me has dejado el alma rota.. te necesito siempre. Te amo mamá", escribe Irene junto a una bella imagen en la que aparece besando a su madre el día de su boda con Kiko Rivera.
Irene Rosales recuerda a su madre: 'Hoy soplarías 59 velas'
La fotografía refleja un momento irrepetible para la colaboradora de Viva la Vida. Tanto es así que incluso ha renunciado a casarse de nuevo por la iglesia, como tenían previsto. "Desde que falleció mi madre no me apetece volver a casarme porque solo me quiero quedar con este recuerdo", explicaba recientemente a sus seguidores. Además, ha recordado también la última noche que pasó junto a ella. "Imbécil yo que no me llevé toda la noche abrazada a tí, besándote y diciédote lo mucho que te quiero", publicó Irene sobre una foto de su madre ante una vela en su recuerdo. Numerosos amigos, entre ellos, Eva González, le han transmitido todo su cariño en este aniversario tan difícil para ella.
También Kiko Rivera ha querido dedicarle unas sentidas palabras a su suegra, a la que estaba muy unido. "Te echo tanto de menos suegra. Un año ya desde que te fuiste y destrozaste nuestras vidas. Pero hoy no voy a dejar que me consuma la tristeza y voy a recordar todo lo bueno que me enseñaste. Por cierto sigo cumpliendo la promesa...tú y yo sabemos lo que es", ha publicado el DJ que ha compartido también una instantánea en blanco y negro de Mayte en el bautizo de una de sus nietas.
El año pasado fue especialmente duro para Irene Rosales, ya que además de despedir a su madre, nueve meses más tarde su padre también fallecía de un tumor cerebral que padecía desde hace 17 años. A pesar de los grandes reveses a los que tuvo que hacer frente, cuenta con el cariño de su marido y sus dos hijas, Ana y Carlota, para hacer más llevadero tanto dolor. También tiene el apoyo incondicional de sus cuatro hermanos, Manuel, Chipu, Vanessa y Mari Tere, con los que mantiene una excelente relación. Todo ello ocurre el año en que Kiko Rivera se distanció como nunca de su madre, Isabel Pantoja, con la que Irene Rosales insiste en no entrar en conflicto puesto que es la única abuela que tienen sus hijas, Carlota y Ana, y siempre ha sostenido que le gustaría que no perdiesen el contacto con ella.
