Han pasado ya dos años desde que los caminos de Rocío Crusset y Maggio Cipriani se cruzaron y decidieron iniciar una relación en la que siempre han apostado por la discreción pero también por la naturalidad. Es por eso que la modelo no ha tenido reparos en responder a las dudas que tienen sus seguidores acerca de algunos datos no conocidos del noviazgo, como por ejemplo si convive en la Gran Manzana con el empresario. "No porque me encanta tener mi espacio personal y creo que mientras pueda permitirmelo tendré un pisito para mí (como Carry en Sex and the city) donde cualquier amiga que necesite espacio en algún momento también pueda disfrutarlo", ha explicado haciendo gala de su gran sentido del humor.
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La modelo de Victoria´s Secret, de 26 años, ya ha presentado a Maggio a su familia y también a sus amigos de toda la vida. En primavera de 2019 Rocío llevó al imperio hostelero Cipriani a la Feria de Abril, donde el italiano pudo conocer una de las fiestas preferidas de su novia y pasar tiempo con los Herrera Montero, quienes lo consideran una persona muy detallista. Meses después la pareja visitaba Ibiza, Madrid y regresaba a la ciudad del Guadalquivir para asistir a la boda de Teresa Onieva y Jaime Blanco, un enlace del que la revista ¡HOLA! publicó las fotos. Su relación ha superado barreras como la distancia, y es que el confinamiento lo pasaron en diferentes puntos del mapa.
Una ajetreada rutina
Rocío hizo las maletas y se instaló hace más de tres años en Nueva York, donde disfruta de una vida plena en la que poco a poco va cumpliendo sus objetivos y metas. De hecho está muy ilusionada con el importante paso académico que ha dado. Además de estudiar a distancia las asignaturas que le quedan de ADE y Marketing, en 2020, tal y como adelantaba en !HOLA! living, se matriculaba en Diseño de Moda en Parsons, una de las escuelas más prestigiosas de todo el mundo - por sus aulas han pasado Tom Ford, Marc Jacobs, Brooklyn Beckham, Bella Hadid o Donna Karan, entre otros-. "Mi mejor momento del año pasado fue empezar la nueva carrera. Me he sumergido tanto en ella que he encontrado mucha paz en mí misma. Me hace feliz quedarme día y noche trabajando en proyectos y eso me ha dado mucha estabilidad emocional. Hacer algo que me llena al 100% me llena de energía para todo lo demás", ha confesado.
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La hija de Carlos Herrera y Mariló Montero, quienes tienen también un hijo llamado Alberto, ha estado varias semanas alejada de las redes sociales, pero ha dejado claro que la desconexión no se debe a nada malo sino más bien todo lo contrario. Dice que en este tiempo ha disfrutado plenamente de placeres como pasear, dormir, salir a comer con su grupo de amigos(junto a ellos ha pasado las primeras navidades sin su familia), estudiar para los exámenes, preparar los proyectos de final de semestre de Parsons o jugar al tenis, un deporte en el que ha encontrado el mejor aliado para ponerse en forma. Además, se ha mudado y ha estrenado nuevo hogar en la ciudad de los rascacielos, donde parece que escribirá el futuro más cercano. Y es que aunque adora España, es en Nueva York donde se desarrolla gran parte de su carrera profesional, con la que prepara proyectos que le llenan de ilusión.
