Dos décadas después de su descubrimiento como concursante de Operación Triunfo 1, Rosa López cumple 39 años en un momento inmejorable para ella. Coincidiendo con la nueva apertura de puertas de la Academia más famosa de la televisión, la ganadora de la primera edición se ha reinventado y ha conseguido, por fin, sacar lo mejor de sí misma después de unos años en los que su carrera y su vida personal estaban 'atadas de pies y manos'. Recobrada su libertad profesional tras romper contrato con su discográfica, la granadina publicó el pasado mes de octubre Vacío, su nuevo single con el que tardó solo unas horas en convertirse en número uno en Itunes. Se trata de un tema lleno de positividad que refleja la ilusión y el momento de crecimiento que ha experimentado la artista en estos años de carrera, incluyendo sus luces y sus sombras.
Tras esta primera toma de contacto de nuevo con su público y la crítica, y aún promocionando este noveno trabajo de la artista, Rosa celebra estos 39 años de vida con sueños por cumplir y disfrutando de su nueva etapa en la música. Eso sí, sin haber perdido la esencia de la joven aspirante a cantante que entró en OT 1 ganando el talent que la catapultó a la fama. La andaluza sigue manteniendo contacto con sus excompañeros de concurso y en estas últimas semanas se ha erigido como una de las protagonistas de la próxima boda de Chenoa. Todo gracias a unas recientes declaraciones en el programa de Andreu Buenafuente que volvieron a dar buena cuenta de su sentido del humor: "Que cuadricule la coordenada y me lance su ramo", dijo sin poder dejar de sonreír. Rosa es feliz viendo a los suyos felices y aunque, musicalmente hablando, muchos de sus compañeros le han tomado la delantera en estos años, la artista sigue dando buena muestra del corazón tan grande que le caracteriza.
De hecho, ahora que está inmersa en la preparación de su gira, son ya varios los conciertos solidarios que ha ofrecido desde la publicación de Vacío. El próximo será el 16 de febrero en El Ejido, cuando de un recital a beneficio de la Asociación El Timón que celebra sus 25 años de trabajo. Este compromiso de Rosa es algo que le caracteriza y de lo que se siente orgullosa, y uno de sus sueños también transcurre por estos derroteros, como ella misma confesaba hace unos meses al admitir que le gustaría tener su propia Fundación para ayudar tanto a grandes como a pequeños. Mientras ese momento llega, la agenda de la ‘cumpleañera’ está repleta de compromisos incluyendo su posible participación en la próxima edición de Supervivientes para la que su nombre suena con fuerza.
