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Elsa Pataky vive feliz en su paraíso playero australiano con Chris Hemsworth y sus tres hijos, pero ellos no impide que cada vez que tiene la oportunidad disfrute de su tierra como la que más. La actriz ha pasado una "intensa pero a la vez divertida semana en España" en la que no ha faltado el trabajo duro, pero tampoco los buenos amigos ni los manjares más deliciosos, sin importar si algunos están un poco fuera de temporada. Puestas de sol, paseos en barco, roscón y ensaimada conforman un resumen perfecto de los últimos días de una de nuestras estrellas más internacionales.
Los compromisos profesionales de la protagonista de Ninette la han llevado hasta Mallorca para ponerse bajo la batuta de la directora Paula Ortiz, que compartía también una fotografía de grupo junto a Elsa y dos compañeras más con el enigmático mensaje. "Esto no es más que un ensayo de lo que viene". De momento, tenemos pocas pistas sobre el proyecto que las ha unido. Tan solo sabemos que el esfuerzo de la última sesión fotográfica lo ha compensado un paseo en barco, una fantástica puesta de sol y la compañía de buenos amigos con los que ha puesto lo guinda a una semana de trabajo con muchas risas y buena comida.
Ha sido precisamente la gastronomía una de las cosas que más ha disfrutado Elsa en este regreso temporal a España. Tantas ganas tenía de degustar los postres que más echa de menos en Australia que no dudó en comer un trozo de roscón de reyes con tres meses de antelación. Eso fue un día, pero al siguiente aún tenía hueco para una ensaimada de Mallorca, el postre por excelencia de la isla balear. La actriz compartía ilusionada ambas imágenes, en las que su camerino se convertía en el lugar más dulce del mundo.
Según publica el diario mallorquín Ultima Hora, Elsa ha sido vista en la playa de Soller ha donde se habría desplazado para realizar la sesión de fotos que tuvo lugar el viernes en el puerto de la localidad. Según este medio, la actriz mostró una actitud muy positiva y una gran profesionalidad durante toda la jornada a pesar del cansancio y las altas temperaturas. Ni siquiera mostró ningún signo de incomodidad cuando tuvo que posar en la orilla tumbada en una hamaca con pantalones vaqueros y camisa de manga larga en una sesión que se prolongó durante aproximadamente seis horas. Mientras la española cumple con sus compromisos laborales, su marido se encuentra en Australia junto a sus hijos, ya que se ha tomado seis meses de vacaciones. La pareja ha explicado en más de una ocasión que siempre cierran su agenda de manera que uno de los dos pueda estar con los niños.
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