Cayetana Rivera está a punto de iniciar una nueva etapa este otoño, tal y como ha confirmado su padre Francisco Rivera. El diestro ha contado, sin poder contener la sonrisa de felicidad, que su hija se va a mudar a Sevilla con él. “Se va a venir a Sevilla, a vivir y estudiar, es la mejor noticia que he tenido en muchos años” comentó en el programa en el que colabora, Espejo público. Ahora que su hija tiene 18 años, ha contado el diestro, puede decidir dónde quiere estar y se va a ir con él. Dejará así Madrid, que es donde está su madre Eugenia Martínez de Irujo que, como ha apuntado Francisco, apoya la decisión que ha tomado. “Eugenia ha respetado la decisión de Cayetana, la apoya. En Sevilla creemos que se va a centrar un poquito más con el tema de los estudios” explicó. Él siempre lamentó no poder pasar más tiempo con ella cuando era pequeña, así que la noticia de este cambio de residencia le hace muy feliz.
Habló además de la reciente celebración de la puesta de largo de Cayetana, una gran fiesta cuyas imágenes y detalles se pueden ver en las páginas de la revista ¡HOLA! de esta semana. “Esa foto es el amor inmenso de dos padres a su hija, era el día de mi hija y no íbamos a permitir que no fuera el día que ella quería, estábamos todos a una” contó sobre la fotografía en la que se le ve con Cayetana y Eugenia. “Bailé con mi hija y con Eugenia” dijo, añadiendo que “la relación que tenemos (se refiere a Eugenia) es por el bien de Cayetana”.
En ¡HOLA!, la fabulosa puesta de largo de Cayetana
El regalo en vídeo-poesía de Francisco Rivera, 'un padre enamorado de su hija'
La llegada de su hija a Sevilla se produce en un momento personal inmejorable para el torero. Su mujer Lourdes Montes y él esperan la llegada de su segundo hijo en común, un niño que se llamará como él (Lourdes dice que ella le llamará Curro) y que se unirá a los juegos de Carmen, por ahora la pequeña de la casa. Cayetana, como ha dicho en alguna ocasión Francisco, adora a su hermana y ahora podrá disfrutar de ella cuando quiera, igual que del bebé que está en camino. Estará además más cerca de su tío Kiko, que estuvo también en la celebración de la puesta de largo y ejerció de DJ para que los invitados bailasen. “Hasta se cambió de ropa, como todo un profesional” afirmó Francisco con orgullo.
