"Irene ya está en casa, con los niños. Ahora necesitamos un poco de tiempo y todo volverá a la normalidad". Juan Pablo Lauro, el marido de Irene Villa, ha querido transmitir un mensaje de calma y positividad y ha explicado a Hola.com que su mujer se recupera, poco a poco, del nuevo varapalo que sufrió la pareja hace tan sólo unos días cuando, tras conocer que esperaban su cuarto hijo, descubrieron que se trataba de un embarazo ectópico y que la periodista tendría que entrar a quirófano para que le extirparan las trompas de falopio.
Irene Villa, ejemplo de positividad y superación ante un nuevo varapalo de la vida
"Todo está bien. Ella se está recuperando", afirma Juan Pablo, quien ha afrontado con el mismo optimismo que su mujer este difícil momento, tal y como él mismo ha revelado a Hola.com. Ambos son ejemplo de superación y esta vez no ha sido distinta. De hecho, la propia Irene Villa, ya en su domicilio acompañada de sus hijos, agradecía las muestras de cariño que ha recibido durante todos estos días.
"Gracias de corazón", ha dicho la escritora, quien no ha perdido la sonrisa en ningún momento. Este sábado abandonaba el centro hospitalario y ponía rumbo a su casa, no sin antes acordarse de todos sus seguidores con un emotivo mensaje que ella misma se ha encargado de difundir. "Aquí seguimos, pero llenos de amor y la energía que nos mandáis por todos los medios posibles!! qué importante es sentirse acompañada en los momentos difíciles", agradecía públicamente.
"Estoy llorando leyendo todos vuestros comentarios. Y sintiendo la fuerza que me mandáis. Me quedo también, como me decís, con disfrutar de los tres regalos que tenemos y nadie como Juan Pablo para expresar el amor que nos dan", añadía en un emotivo mensaje.
Su marido tampoco se ha olvidad de agradecer los numerosos mensajes que han recibido desde que recibieron la triste noticia. "Gracias a Dios la operación fue bien. Gracias de todo corazón por las muestras de cariño!! son muy necesarias. El amor cura, lo estamos sintiendo. Besos y muchas gracias", escribía por su parte.
