ORDESA
Lo tiene todo: picos de 3000 metros (entre los que sobresale el Monte Perdido), espectaculares cascadas entre hoces y paredones, restos de glaciares, espesos bosques de hayas, el macizo más alto de Europa. Así se entiende que la Unesco haya nombrado este parque nacional Patrimonio de la Humanidad y Reserva de la Biosfera. De los cuatro valles por los que se extiende –Ordesa, Añisclo, Escuaín y Pineta–, el primero es el que tiene mayor fama. Entre sus imprescindibles: las cascadas del Estrecho, la Cueva, las Gradas de Soaso y, sobre todo, la Cola de Caballo; el centro de visitantes El Parador, el pueblo de Torla, el cañón de Añisclo y las gargantas de Escuaín.