Carlos III nació en 1948 y la princesa Ana en 1950, así que ellos sí vivieron el cambio familiar que supuso la prematura muerte de su abuelo, Jorge VI, lo que convirtió a su madre en jefa del Estado desde 1952. Entonces ella se volcó en la vida institucional, dejando a la familia en manos del duque de Edimburgo. En cambio, cuando nacieron los príncipes Andrés en 1960 y Eduardo, en 1964, el reinado de Isabel II ya se estaba consolidando, atravesaba un buen momento y ella tuvo la oportunidad de vivir esas dos maternidades de un modo distinto, más cercano