Seguramente tuvieras un inicio de lactancia bueno o después de practicar y adaptaros mamá y bebé, consiguieras mantener una lactancia exitosa, ya sea exclusiva o mixta. Pero no todo el camino es de rosas y en ocasiones nos podemos encontrar con que el bebé no quiere comer, se declare en huelga de lactancia y además, que esto ocurra de forma inesperada.

 

¿Cuáles son los motivos más comunes por los que tu bebé se declara en huelga de lactancia?

Los motivos que pueden derivar en una huelga de lactancia son varios. Lo más importante es que identifiques cuál es la razón y pongas medios para superarlo. Desde Lansinoh, empresa dedicada a la maternidad y la lactancia, la experta Laura Lázaro nos cuenta que: “Los bebés pueden atravesar ‘baches de crecimiento’ o crisis de lactancia debidos a que la producción de leche aún no esté regulada y sea menor a la que el bebé necesite, sumado a que el sabor de esta también puede cambiar. Pero no hay que alarmarse porque se trata de algo totalmente transitorio”.

Otro de los motivos más comunes por los que puede ocurrir este parón repentino es porque desde la normal pérdida de peso que inicia el niño nada más nacer, hasta que se instaura la lactancia materna, pueden darse algunos factores externos que compliquen la situación como: “la confusión tetina-pezón derivada del uso de pezoneras, biberones, chupetes… demasiado pronto. Lo más importante es retirar todas las tetinas y/o pezoneras lo antes posible y retomar la lactancia tan pronto como se pueda para mejorar el agarre del bebé”, detalla Laura.

Cómo diferenciar una huelga de leche a un destete natural

Es normal que cuando esto ocurre las mamás piensen que su bebé ya no quiere mamar y prefiere el biberón, pero podéis estar tranquilas porque los motivos por los que ocurre un destete natural y una huelga de lactancia son muy diferentes.

El destete natural se realiza de una forma progresiva y normalmente ocurre a partir del primer año de vida del bebé, mientras que las crisis de lactancia son puntuales y pueden darse por algún motivo de malestar del pequeño como una congestión, dolor en el cuello, otitis… o por otro tipo de razones como el estrés de la madre, un cambio de perfume…“Normalmente, la huelga de lactancia tiene una duración entre dos y cinco días. Durante este tiempo, es  recomendable usar un sacaleches para mantener la producción y evitar obstrucciones. Para alimentar al bebé en este periodo de tiempo, hazlo siempre con un vaso, una cuchara o una jeringuilla” y evitar de este modo el uso de tetinas, nos explican desde Lansinoh.

¿Qué pasa si la huelga de lactancia se produce solo en un pecho?

Normalmente los bebés siempre tienen preferencia por uno de los dos pechos y las razones pueden ser diversas. El niño se siente más confortable por la postura, tiene alguna contractura provocada durante el parto que le haga sentirse incómodo o simplemente puede tratarse por la diferencia de producción de leche entre uno y otro.

En definitiva, existen ocasiones en las que el bebé finalmente decide solo comer de uno de los pechos y su huelga de lactancia se reduce a un seno: “Sí, esto es algo muy habitual durante la lactancia. Siempre hay un pecho que produce más, por tanto, el otro baja la producción, y el bebé siempre se siente más cómodo en el que hay mayor cantidad. Cuando esto ocurre y el bebé rechaza un pecho es importante priorizar y empezar ofreciendo el de menor producción ya que al inicio de la lactancia el bebé siempre hace una succión más vigorosa y por tanto, esto permitirá el aumento de la producción de ese pecho. También podemos utilizar un sacaleches en el pecho de menor producción para estimular y aumentar la producción de leche”, aclara Laura.

Cómo retomar la lactancia de forma positiva

Pasados unos días la situación revertirá y la lactancia volverá a ser como siempre, pero para poder ir retomando poco a poco de nuevo la rutina: “Es importante ofrecer el pecho en lugares tranquilos sin otros estímulos, a demanda completamente, y estimulando la producción de leche”, aconseja la experta. Además, es bueno tener en cuenta las siguientes recomendaciones cuando vuelvas a darle el pecho tras haber sufrido una huelga de lactancia:

• Busca una posición en la que ambos os sintáis cómodos
• Ofrécele el pecho cuando tenga sueño
• Evita que tu bebé tenga distracciones. Una luz suave ayudará a que se tranquilice
• Mécelo
• Pasa todo el tiempo que sea posible con tu bebé, con constantes demostraciones de cariño