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De igual forma que la duquesa de Cambridge fue de nuevo protagonista por su estilismo en la celebración de San Patricio, al otro lado del Atlántico los Trump acudieron a sus compromisos oficiales. Si el sábado organizaron un recibimiento para el Primer Ministro de Irlanda en la Casa Blanca en una celebración en la que todo se tiñó de verde, desde la fuente delantera de la residencia presidencial hasta el vestido y los zapatos de la primera dama en un homenaje al país; el domingo por la mañana el matrimonio acudió a la misa en St. John’s Episcopal. Fue aquí cuando Melania, reconocida en este tipo de actos precisamente por sus looks con mensaje (siempre a juego con la ocasión como mostró el día anterior o en otras festividades como Navidad o Acción de Gracias), sorprendió saliéndose de su habitual estilo con un guiño a las royals a través de un abrigo-vestido en color blanco de estética naíf con el que volvió a acaparar titulares.
Sin medias, como las expertas en moda recomiendan lucir cualquier tipo de estilismo, la primera dama lució la prenda de abrigo de una manera que, aunque ha utilizado a menudo, es característica de otras mujeres de la realeza. Y es que son las royals británicas Kate Middleton o Meghan Markle quienes han vuelto el abrigo-vestido un recurso con el que dar en la diana sin complicarse.Además de convertirse en protagonista indiscutible del look, es una pieza icónica y atemporal que favorece por su corte a todos los tipos de cuerpo.
El modelo de Melania, largo hasta la rodilla, se entallaba en la zona de la cintura. Los detalles que sumaban puntos de originalidad fueron la doble hilera de botones sobre el cierre cruzado y las solapas con detalles ribeteados a modo de encaje. Una prenda muy femenina que daba un aire angelical a la mujer de Donald Trump.
Discreta sí, pero siempre estilosa parecen ser los puntos a tener en cuenta por Melania Trump para cualquier cita ya que el toque más impactante fueron sus zapatos. Recurriendo a su colección de tacones, rescató un modelo de hace varios años que lució como si fuera de estreno ya que sigue una de las tendencias de la temporada: el animal print. Un modelo de stilettos de Louboutin en tono nude decorados con motivos que imitan la piel de serpiente, el estampado de la primavera que conseguía potenciar la prenda lisa blanca.
Por último, y siguiendo su línea de sencillez también en cuanto a su aspecto, lució un maquillaje natural en el que sus ojos marcados eran el centro del beauty look. Su melena suelta con ondas deshechas, algo más corta de lo habitual, su último corte de pelo muy sutil, daba también un toque fresco y primaveral a su rostro.
Esta temporada, teniendo en cuenta que Saint Laurent, Off-White o Philosophy han encontrado inspiración en los reptiles, es una buena excusa para que Melania recupere sus modelos estampados. Y es que además de los tacones So Kate en color nude con tacón de 12 cms, para su estilismo por San Patricio, la primera dama es una gran aficionada de este tipo de estampado, un print que ha lucido en varias ocasiones como por ejemplo durante septiembre de 2017, con motivo de su visita a Texas tras el paso del huracán Harvey, con diseños de Louboutin y Manolo Blahnik tanto en colores neutros, cálidos o pasteles siempre a tono con el resto de su estilismo.
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