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No hay palabras que describan la ciática. O quizá sí. ¡La ciática duele! La molestia puede ser tan grande que nos deja clavadas en el sitio sin poder movernos. ¿Y cuáles son las causas de este dolor? Nos lo aclara el equipo médico de la Universidad de Harvard.
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Causas que producen la ciática
Son varias las razones por las que puedes tener ciática. Entre las más frecuentes, Harvard destaca las siguientes:
Hernia de disco
Una de las causas más comunes de ciática es sufrir una hernia de disco en la parte baja de la columna vertebral. También se le llama disco deslizado, aunque no hay deslizamiento real involucrado.
Los discos espinales se encuentran entre las vértebras, y actúan como cojines para evitar que los huesos se toquen entre sí. Absorben las fuerzas que se ejercen al caminar, correr, sentarse, girar, levantar y todas las demás actividades que realizamos. También las de las caídas, colisiones y otros accidentes.
Un disco herniado es un problema que puede suceder a cualquier edad, pero el riesgo aumenta con la edad, siendo más frecuente cuando somos más mayores, a partir de la sexta década de la vida. Sucede cuando el relleno gelatinoso de un disco espinal atraviesa la capa externa del disco y sobresale. Cuando esto sucede, el material puede presionar un nervio cercano, generando señales anormales al cerebro y provocando la ciática.
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Estenosis espinal
El canal espinal protege la médula espinal y los nervios que corren hacia arriba y hacia abajo por la columna vertebral. La estenosis espinal es el estrechamiento de este canal. Cuando esto ocurre, los nervios pueden comprimirse, causando dolor. Debido a que las vértebras lumbares sufren el estrés más constante y soportan el peso máximo, la estenosis lumbar es el tipo más común de estenosis espinal.
En su mayoría, la estenosis espinal es causada por una combinación de cambios relacionados con la edad:
- Degeneración del disco.
- Osteoartritis de la articulación facetaria.
- Engrosamiento de los ligamentos.
La estenosis espinal puede estar presente desde el nacimiento como resultado de condiciones raras. Más a menudo, el canal espinal puede ser algo más estrecho de lo normal al nacer, una condición llamada estenosis congénita. Dado que el canal no es tan ancho como el de una persona promedio, incluso cambios leves relacionados con la edad, como una ligera protuberancia del disco y la artritis facetaria, pueden causar síntomas de estenosis. Algunas personas experimentan estos síntomas en sus 40 o antes. Por otro lado, las lesiones, tumores y ligamentos engrosados también pueden estrechar el canal espinal.
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Espondilolistesis
Los huesos de la columna están apilados uno encima del otro, separados por discos. La espondilolistesis ocurre cuando un hueso vertebral se desliza hacia adelante en relación con el hueso debajo de él. Cuando la vértebra L4 se desplaza sobre la vértebra L5, puede causar un bloqueo en el canal espinal que lleva a la presión sobre una raíz nerviosa y, por lo tanto, a la ciática.
La espondilolistesis es un hallazgo común cuando los adolescentes experimentan dolor de espalda persistente. En este grupo, suele ser causada por una lesión traumática o un defecto congénito. En adultos, la espondilolistesis se debe con mayor frecuencia a la osteoartritis.
Trauma
Cualquier lesión o accidente que afecte la nalga o estire un músculo isquiotibial puede dañar el nervio ciático. Por ello, las caídas, accidentes automovilísticos y lesiones deportivas pueden provocar ciática.
Embarazo
Durante el segundo y tercer trimestre, el cambio de peso y la relajación de los ligamentos (¡sin mencionar la personita que crece dentro de ti!) pueden ejercer presión indirecta sobre el nervio ciático.
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