Ideas prácticas

Cómo ahorrar en calefacción este invierno, sin pasar nada de frío

En calefacción y gasto energético, porque se avecinan meses fríos. Te contamos cómo ahorrar sin perder confort en casa.

Por Alejandra Muñoz

Cuando llega el invierno, a todos nos gusta la sensación de llegar a casa, abrir la puerta y sentir el calor. Mantener un ambiente agradable es primordial para el confort pero a nadie le gusta gastar por gastar. La mala noticia de la encender la calefacción es que la factura crece. Pero además de gastar menos con unos sencillos trucos, también reduciremos la huella de carbono y haremos un consumo más sostenible. Es importante utilizar un sistema de calefacción eficiente, controlar la temperatura y conseguir un buen aislamiento en los cerramientos.

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"Elegir un sistema de calefacción sostenible y eficiente es una de las claves para evitar un gasto exagerado a la vez que reducimos el consumo energético", indican desde Grupo Rehau, especialista en soluciones eficientes y sostenibles para la construcción. Ellos apuestan por el sistema de superficies radiantes: "proporciona un elevado nivel de confort, garantizando una gestión óptima de la energía. Se trata de una alternativa de bajo consumo que, mediante un circuito de agua caliente, utiliza las superficies del suelo, pared o techo para distribuir el calor por toda la casa consiguiendo una total uniformidad de la temperatura en el ambiente".

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¿Cuáles son los trucos y consejos que podemos aplicar para ahorrar en calefacción?
 

1. Conocer la temperatura ideal a la que mantener la casa. Las necesidades de temperatura no son iguales durante las 24 horas del día. Durante el día, mientras haya gente, la temperatura ideal para estar en casa es de 21º C (piensa que no hay que estar en manga corta en el interior sino adecuadamente vestidos para la temporada invernal).  Durante la noche, la temperatura disminuye a los 17º C. "Mantener siempre la misma temperatura no solo es más caro, sino también contraproducente: a más de 23º, el ambiente se reseca. Para conciliar el sueño por la noche se necesita una temperatura más baja que durante el día", explican desde Rehau.

Si no estamos en casa, no necesitamos calor por lo que la temperatura debe ser más baja. Debes tener en cuenta también la ubicación de tu casa, algunas son más o menos cálidas en función de la orientación y horas de sol que recibe. Así, esto hará que varíes la temperatura entre 19 y 21º C con gente o de 15 a 17 º C por la noche. Subir 1º C la temperatura de la calefacción eleva un 7% el gasto de energía.

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2. Mantener una temperatura constante. Es mejor que la casa mantenga siempre una temperatura que los golpes de calor, que aumentan el gasto.  Así que si quieres ahorrar lo mejor es que mantengas siempre la casa caldeada, jugando con las temperaturas indicadas anteriormente. Apagar la calefacción cuando te vas de casa solo provoca que esta se enfríe mucho y le costará más calentarse cuando llegues, además que no ahorrarás en la factura.

3. Aprovechar la luz natural. Siempre que puedas, levanta las persianas en las horas de sol. ¡Aprovecha los días soleados! Cuando caiga, entonces baja las persianas y corre las cortinas para que la casa no pierda ese calor acumulado.

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4. Buenas ventanas, buen aislamiento. Para ahorrar en calefacción es importante que no se pierdan grados. Y en este aspecto elegir un buen cerramiento es crucial. Hasta el 30% de las necesidades de calefacción, vienen por pérdidas de calor originadas en las ventanas (según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía IDAE). El doble cristal reduce hasta un 50 % la pérdida de calor, pero no te olvides de la carpintería (con rotura de puente térmico) o del aislamiento del cajón de la persiana. En este artículo encontrarás las claves sobre si necesitas cambiar las ventanas.

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De todas formas, aunque estemos en invierno, no olvides que también debes ventilar la casa. Renovar el aire es fundamental para garantizar su salubridad. Baja la calefacción, abre las ventanas y con 5-10 minutos al día. será suficiente.

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5. Sí al termostato. Si aún no tienes, instálalo para ahorrar en calefacción. Los modelos programables te permiten ajustar la temperatura a la que quieres que se mantenga la casa según las horas del día, sin preocuparte de más. Así la casa se mantendrá a una temperatura menor cuando no haya nadie y se pondrá a 21º C cuando vayáis a llegar (basta con una hora antes). El termostato logra mantener una temperatura óptima y hará que ahorres entre un 8 y un 20%, según modelos. Los hay digitales que puedes controlar desde una app instalada en el teléfono, PC o tablet y no requieren una instalación complicada (ni obras).

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Ahora ya sabes lo que debes hacer para ahorrar este invierno en calefacción y notarlo en la factura sin pasar frío. Solo una última recomendación: si tu sistema de calefacción es de caldera con radiadores (puede ser también por suelo radiante) que funcionan con agua, púrgalos antes de la llegada del invierno para que funcionen correctamente. Intenta no cubrirlos y entorpecer la distribución del calor con muebles muy pegados. 

En todo este tema del ahorro en calefacción, también interviene la caldera. Supone una inversión mayor, pero debes tenerlo en cuenta. Una de bajo consumo (como las de cogeneración) te hará ahorrar. En cualquier caso, mantén la caldera siempre a punto, realizando revisiones periódicas.

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