Rebozado y frito es una de las formas más clásicas de preparar el bacalao fresco. Así lo vamos a hacer para acompañarlo con unos pimientos de piquillo cocinados con ajo, azúcar, vinagre, sal y pimienta. ¡Una mezcla espectacular!
Ingredientes
- 800 gramos de bacalao fresco en tajadas
- 2 latas de pimiento del piquillo
- 1 diente de ajo
- 1 cucharadita de azúcar blanca
- 1 cucharadita de vinagre de jerez
- aceite de oliva
- harina
- huevo
- sal
- pimienta
Preparación
- Partir los pimientos en tiras, y conservar su jugo.
- En una sartén con el fondo de aceite freír el diente de ajo con piel.
- Cuando empiece a dorarse agregar los pimientos con su jugo, el azúcar y el vinagre, salpimentar.
- Dejar que se cocinen unos minutos a fuego suave moviendo la sartén en vaivén para que quede una salsa ligada.
- Pasar por harina y huevo batido las tajadas de bacalao y freír en abundante aceite caliente, pero no humeante, y dejar hasta que adquieran un tono ligeramente dorado por fuera y una textura jusosa en el interior.
- Pasar a un papel absorbente y servir con los pimientos de piquillo confitados.
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